Soy Mica tengo 18 años, hace unas semanas estaba en el semáforo en el auto de mi papá y un pibe de 20 años maso de esos que te lavan los vidrios empezó a darme charla, yo le contestaba seca pero el seguía. En eso me dice que por las fiestas no tenía comida si yo podía alcanzarle algo. Me dio lástima y le dije que si. Me dijo que iba a estar hasta las 20. Tipo 19 agarre el auto y volví, paré en la esquina y no lo encontraba, me baje con la bolsa y apareció. Me agradecía y me dijo que lo acompañara a conocer a su madre que estaba enferma. Era una casa en la esquina, entre un poco desconfiada pero parecía bien. Entramos y la madre estaba en silla de rueda y era creo que casi ciega, no veía quienes estábamos ahí. La casa era de un dormitorio y el pibe dormía en un colchón en el comedor. Saludo de lejos a la señora y el pibe me dice que estaba muy bonita, me reí y me despedí, cuando voy a darme vuelta me abraza y me decía que esperara un poquito, y me tocaba la panza. La madre me dice que quedará a charlar un ratito, me senté en el sofá que era una cama y el pibe se sentó conmigo, sigo hablando con la madre y el empieza a tocarme la pierna, me puse nerviosa pero la madre ni se daba cuenta. Le digo que me tengo que ir y la madre me empieza a contar todo lo que le había pasado y me daba cosa irme, en eso el pibe se baja el short y queda con la pija al aire. Me impresionó la situación pero también lo gruesa que la tenia, me agarró la mano y se la puso en la pija. Empecé a pajearlo y no podía creer, me distraía el pedazo de pija y la madre me contaba algo grave. En eso el pibe ya de pija muy dura se levanta y empieza a intentar ponérmela en la boca, yo intentaba esquivarla pero la pija me la pasaba por toda la cara hasta que abrí la boca. Empecé a tragársela y el charlaba con la madre. Estuvo un ratito hasta que me llevo al cuarto y movió a la Madre hasta la entrada de la casa, se acercó y otra vez a chuparla, no podía creer. Me levanto y me puso en 4 en la cama. Era muy bueno cojiendo, me hizo venirme y yo no podía creer la situación. Me acabo en las nalgas y me llevo afuera. Me despedí de la madre y me fui al auto. Llegue y el apareció al costado, me dijo que le diera unos pesos para la noche, le di y se fue. No volví a pasar por esa esquina pero fue una experiencia muy rara