SUKIYAKI

2023-01-15


Nuevamente Norberto cuenta como son sus aventuras de macho dominante en esta ocasión en la universidad. Hoy os traigo mi primer relato, en el que os contaré una de las múltiples aventuras que tuve con Sukiyaki, una compañera de la universidad de Tokio que disfrutaba de la sumisión y la humillación. Esta historia que traigo hoy sucedió un viernes por la noche cuando noté que se dirigía a la biblioteca de la universidad. Le seguí adentro sin alertarle de mi presencia. La biblioteca estaba prácticamente desierta, como era de esperar la noche de fin de semana. Le seguí a distancia mientras se dirigía hacia las grandes estanterías de la parte trasera. Cuando parecía que había llegado al pasillo que estaba buscando me dirigí hacia el yo también, comprobando si había más gente en aquella solitaria biblioteca. No había nadie. Sukiyaki estaba de espaldas a mí cuando entre en su pasillo recuerdo era la sección 7. Estaba vestida simplemente con un vestido de verano blanco con flores de Sakura (cereza para los que son latinos) y un calzado deportivo. Estaba absorta en la lectura de uno de los libros. Me apoyé contra una estantería y esperé a que ella sintiera mi presencia. No pasó mucho tiempo antes de que levantara la cara del libro y se girara lentamente hacia donde yo estaba esperando. Cuando me vio no aparentó estar sorprendida, simplemente cerró el libro que había estado mirando y lo devolvió a su lugar. Luego se agachó y abrió el bolso que estaba a sus pies. Se sacó las gafas y se las puso, luego se quedó mirándome, sin sonreír ni hablar. Esperando. Extendí la mano con la palma hacia arriba e hice un movimiento de elevación con los dedos. Miró a su alrededor rápidamente para asegurarse de que no había nadie cerca, luego se agachó, agarró el dobladillo de su vestido con ambas manos y lo levantó lentamente hasta que se empezaron a ver sus bragas, luego su estómago y finalmente su sujetador quedó al descubierto. Su ropa interior era blanca, con un patrón de pequeños detalles rojos, como si fuera ropa de niña de primaria, era de algodón suave. Continuó simplemente mirándome y esperando, obediente como siempre había sido. Después de un rato volví a extender la mano. Esta vez moví dos dedos hacia mí. Al principio, pensó que tenía la intención de que se acercara y comenzó a caminar hacia mí, pero levanté la palma de la mano, negué con la cabeza y ella se detuvo. Extendí la mano y tiré suavemente de la tela de su vestido. Se soltó el vestido y dejó que cayera al suelo. Tras esto se agacho y me lo entregó. Con el vestido en la mano me di la vuelta y empecé a alejarme. Se quedó sin aliento cuando vio que me iba, aparentemente pensando que la dejaría tirada en la biblioteca sin nada más que su sujetador y sus bragas. Pero ella no dijo nada. Para confirmar su impresión, regresé un par de pasillos hacia la entrada, me metí en uno y escondí su vestido en un estante vacío. Luego me acerque de nuevo por el otro lado para ver qué estaba haciendo. Simplemente estaba parada allí, con los brazos relajados, esperando. Pero tenía una expresión ansiosa en su rostro. Continué observándola durante varios minutos. Después de un rato caminó hasta el final del pasillo donde yo me había ido y con cuidado asomó la cabeza, buscándome. Hice un pequeño sonido de carraspeo y ella se dio la vuelta para mirarme con rapidez, aterrada por quien pudiera ser. Pero cuando vio que era yo, se relajó de nuevo y permaneció en silencio. Me acerqué a ella y comencé a acariciar sus pechos a través de su sostén. Levantó las manos y las puso detrás de su cabeza y cerró los ojos. Le di la vuelta y continué masajeando sus senos mientras presionaba mi erección entre sus nalgas. Lentamente me alejé de ella y con un simple gesto ella entendió que debía bajar sus brazos. Manteniendo la mirada hacia mí, comenzó a acariciarse y a deslizar una de sus manos al interior de sus bragas. Su boca se abrió lentamente mientras su mirada, sin dejar la mía, se volvió hacia adentro, perdida en la mezcla de placer y vergüenza que encontraba tan irresistible. Si alguien hubiera venido en ese momento y le hubiera sorprendido masturbándose frente a mí en sujetador y bragas, se habría sentido devastada, pero la posibilidad de que tal cosa sucediera obviamente le excitaba mucho. Decidí empeorar un poco la situación y dando un paso adelante, me arrodillé frente a ella y lentamente le bajé las bragas para que quedaran a mitad de sus muslos, dejando su coño expuesto. Mantuvo sus ojos en los míos y solo hizo un pequeño sonido, un gemido. Permanecí arrodillado por un rato, mirando su mano, ahora visible, deslizándose dentro y fuera con suavidad. Volví a ponerme en pie, aún muy cerca de ella, aun sosteniendo su mirada, mientras desabrochaba mis pantalones y sacaba mi polla, rodeándola con los dedos de su otra mano. Dejé que me acariciara por un rato mientras continuaba tocándose a sí misma y le di ordenes de que me dijera con su voz tierna YAMETE KUDASAI, ONICHAN. Puse mi mano sobre su cabeza y presioné suavemente hacia abajo. Inmediatamente cayó de rodillas, pensando que yo quería que empezara a usar su boca. En cambio, puse mi mano en su frente y no le permití acercarse. Confundida, soltó mi polla y se apoyó en sus manos, sin saber lo que era lo que yo quería. Empecé a empujarla hacia atrás hasta que ya no pudo mantener el equilibrio sobre sus manos y cayó sobre su espalda con un pequeño grito, sus piernas se desplegaron debajo de ella. Ella me miró desde el suelo, parpadeando detrás de sus gafas y respirando con dificultad. Abrí sus piernas con facilidad, luego me paré entre sus rodillas y comencé a masturbarme. Yo también estaba un poco nervioso, así que no traté de contenerme. Y de todos modos, la mezcla de terror y excitación en su rostro, combinada con su posición y estado de desnudez, fue más que suficiente para llevarme al orgasmo. Sandra parecía casi petrificada cuando derramé mi semen sobre ella: unas pocas gotas cayeron hasta la punta descubierta de su barbilla, algunas en su sostén y el resto en su estómago, además de un poco en coño. Volví a abrocharme los pantalones y me alejé. Sukiyaki volvió a preguntarse si me estaba yendo, quizá aterrada ante la idea de que haría ella desnuda y llena de semen si yo me iba. Pero solo fui a buscar su vestido. La mirada de alivio en su rostro fue muy clara cuando vio que llevaba el vestido en mis manos. Le ayudé a ponerse de pie, parte del semen en su estómago corrió hacia coño mientras se ponía en pie. Se subió las bragas y luego me miró. Levanté sus brazos, y luego dejé caer el vestido sobre ella, vistiéndola de nuevo. Cuando el vestido estuvo listo, le di la vuelta y le subí la cremallera. Con mi mano presioné le vestido contra su abdomen y pecho. Inmediatamente comenzaron a aparecer manchas oscuras en la tela de su vestido, mostrando donde mi semen aún estaba húmedo sobre su piel. Extendí un dedo índice y limpié parte del semen de su barbilla. Sostuve mi dedo frente a ella para que pudiera verlo, luego lo puse contra sus labios. Inclinó un poco la cabeza para llevárselo a la boca y pude ver que estaba mirando las manchas de su vestido mientras me lamía el dedo. Y de repente comenzó a llegar al clímax, presionando ambas manos entre sus piernas e inclinándose como si tratara de no orinar. Sus gafas cayeron a la alfombra. Hizo un sonido, “Oooo. Oooo”, una y otra vez, lo más bajo que pudo, y su expresión parecía casi de dolor cuando me miró. Cuando terminó y se enderezó de nuevo, cogí sus gafas y se las puse de nuevo. Luego levanté su vestido y pasé dos dedos entre sus piernas para recoger algo de la humedad de la entrepierna. Unté la humedad en sus labios. Entonces cogí su bolso y se lo entregué. Me puse tras ella y, poniendo mis manos sobre sus hombros, le empujé suavemente en dirección a la salida. Cogí el libro que había estado mirando del estante y le seguí. Sukiyaki obviamente esperaba escabullirse sin ser observada, por lo que se quedó sin aliento cuando le agarré del hombro justo cuando pasaba por el mostrador de pago y dije en voz alta: “Sukiyaki, no te olvides de sacar tu libro”. Tuvo que darse la vuelta y hurgar en su bolso en busca de su tarjeta de la biblioteca bajo la mirada del bibliotecario. Parecía no notar sus labios brillantes, la pequeña gota blanca en su barbilla o las manchas en la parte delantera de su vestido, aunque estas últimas ya se habían secado un poco y no eran tan obvias como antes. Pero ella sabía que estaban allí y se sonrojó profundamente durante toda la transacción y continuó sonrojada todo el camino de regreso a su dormitorio. Cuando llegamos a su puerta, se giró hacia mí y me dijo con algo de enfado: “Norberto,(se escuchaba sexy con su voz de japonesa) no quiero que nadie más sepa sobre…”. Se detuvo y miró hacia abajo, sonrojada. “… sobre lo que hacemos”. Puse una mano en su hombro y alisé su pelo con la otra mientras respondía: “Relájate. No notó nada”. Empecé a masajear sus omóplatos, al mismo tiempo que desabrochaba sigilosamente su vestido en la parte superior mientras continuaba. “Solo agradece que te haya devuelto tu vestido antes de salir”. Y con eso, rápidamente le desabroché el vestido y dejé que cayera al suelo alrededor de sus tobillos. Luego, antes de que pudiera reaccionar, la atraje hacia un beso apasionado, acariciando su trasero por un momento antes de soltarla. Con un grito ahogado, buscó frenéticamente en su bolso la llave de su habitación, abrió la puerta y entró corriendo. Espero que os haya gustado a todos mi primer relato de cuando estudie mi maestría en Japón y espero traeros más en los que mejore mi estilo lo máximo posible.

Autor: MADRESEX Categoría: Dominación

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DEDEANDO a la PERRA 2

2023-01-15


Hola mis amigos, después de haber dado placer con mis dedos a la hermosa perra Terry de mi amiga, la perra me seguía y buscaba o rascaba la puerta de mi cuarto. Me exitaba saber que deseaba que la tocará, se presentó la ocasion que estuve solo y llegó ella, rasgo mi puerta. Y mi sorpresa fue que me habló mi amiga que si podía hacerle favor de bañar a su perra y yo, no me gustan los animales (pero dentro de mi sería un placer) pero haré el intento. Cabe aclarar que mi amiga la mete a la regadera y me desnude y la empecé a bañar. Me senté en el piso y la puse a lamer mi verga ya dura y lo hacía delicioso le alcance su vulva y la empecé a dedear y ella solita se daba placer, sentía riquisimo el agua caliente se mezclaba con sus fluidos. La voltie y vi su vulva inchada y caliente, la enjabone y le pasaba mis dedos por su vulva. le lave su interior con jabón para poderla penetrar, y ufff que delicia sentir como se la iba metiendo, sentir como le resbalaba mi verga en su vulva, parecía putita sola se dejaba caer. Y ella disfrutaba, me apretaba bien rico mi verga, y yo feliz y caliente con mi trozo super duro. Se la metía toda y la disfrutaba. Hasta que me vine delicioso le solté varios chorros de mecos y se los deje bien adentro Me limpio mi verga y la termine de bañar. Según jamás la han cruzado con un perro, solo pura inseminación artificial, si supieran qué yo soy su macho, ahorita está inseminada y al parecer preñada. Ya les platicaré, que se siente coger una perra preñada. Saludos yoplis1515@hotmail.com

Autor: Yopli Categoría: Zoofilia

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Mis inicios a los 7 años VI parte, solo quiero jugar con Abelardo

2023-01-15


Hola amigos aquí les traigo una nueva historia con Abelardo solo quiero jugar con él.. Hola amigos estoy de vuelta con una nueva historia y espero que les guste. El día que Abelardo me tocó terminamos y me mandó a la sala para esperarlo ahí y que nadie sospechara lo que había pasado o lo que me había hecho en el juego del sexo, entonces salí del cuarto me fui a la sala al primer piso y lo esperé ahí, al rato llego Gustavo que había ido a jugar fútbol con los demás muchachos e hice como si no hubiese pasado nada, llego doña Maruja nos dió de cenar, y me tuve que ir a mi casa. Al día siguiente debía ir al colegio, espere a Gustavo y nos fuimos, todo el día pensaba en lo que me había pasado el día anterior con Abelardo y pensaba es que como le hará o le hizo Nandito para aguantar tantas pingas un solo día y hasta quería preguntarle pero no me animaba porque no quería que sepa que había visto lo que le hicieron los demás muchachos. Esperaba con ansias la salida de la escuela para ir a casa de doña Maruja y poder ver al guapo de Abelardo, así fue sonó la campana de salida y ahí ya estaba Gustavo esperándome para ir a casa y poder ver a Abelardo y seguir aprendiendo con él, llegamos a casa de doña Maruja y grande fue mi sorpresa que Abelardo no estaba se fue a clases de la universidad, me quedé apenado pero yo decía termino de almorzar y voy a casa a bañarme para estar limpio y así el pueda seguir lamiendo y tocando mi culito, eso hice y regresé a casa de doña Maruja para esperarlo y tal fue mi sorpresa que nunca llegaba, volví a preguntar a doña Maruja y ella me dijo. Yo: Doña Maruja a qué hora llegará Abelardo porque quiero que me enseñe mis tareas? Doña Maruja: Nelsito Abelardo me dijo que regresará tarde ya que de la universidad irá a entrenar con su equipo de fútbol. Yo: ok entonces lo esperaré en casa, la verdad estaba con la adrenalina que corría por mis venas, quería que Abelardo vuelva a tocarme y hacerme lo que me hizo el día anterior, quería verle la pinga y chuparlo cómo me enseñó, pero tenía que esperar, baja del segundo piso Gustavo y le dice a su mamá. Gustavo: mamá hoy tenemos trabajo del colegio en casa de un compañero y debo ir allá a las 3pm, al escuchar eso decidí salir hacia mi casa y esperar a que llegue Abelardo y poder seguir con el sexito que tantó me estaba gustando y estaba deseando y eso hice me fui a mi casa y me puse a vigilar de la ventana a qué hora llegaba Abelardo, estando en casa y a la ventana veo a Gustavo irse a casa de su compañero para realizar su trabajo y hasta no pasaba nada, todo pasa cuando veo a Gabriel ir a casa de Nandito, me quedé mirando haber que hacía y veo que Gabriel sale de la casa de Nandito junto a él, muy alegres y risueños, me quedé viendo que iba a pasar, yo ya comenzaba a temblar y sentir otra vez el porque no me buscan a mí y si a Nandito, esperé que se perdieran por la calle y me quedé viéndolos hasta que desparecieron, me puse a pensar los sigo o me quedo a esperar a Abelardo? algo me decía ve siguiéndolos y eso hice, me cuide mucho de no alcanzarlos ni que me vieran solo iban ellos 2 y todo parecía tranquilo como si se iban al río, hasta que tomaron el camino hacia las casas abandonadas que dejó el estado, grande fue mi sorpresa cuando llegue al a la pared desde donde podía ver todo que ahí se encontraban Alberto, su amigo y Jackson, esperando a que Gabriel llegara con Nandito, al verlos llegar los 3 saludaron a Nandito a una sola voz. Todos: hola Nandito, cómo estás? Nandito: bien, todo bien, Alberto: mira Nandito acá te hemos traído el chocolate que tanto te gusta. Nandito: wau muy bien muchas gracias! Alberto: ya sabes Nandito lo que debes hacer, acá estamos todos. Nandito: si está bien, comenzó a desnudarse y ellos estaban como lobos cuando veen al carnerito cómo presa, esperaron ah qué Nandito se quitará el calzoncillito color blanco, con lo que se quedo parado y todos al costado mirándolo. Jackson: sácate todo Nandito, queremos verte desnudito y lo que más queremos ver es tu culito, Nandito hizo caso y se quedó totalmente desnudito frente a ellos, el primero en entrar en escena fue Jackson, que de acercó a él, lo agarro de la mano y lo hizo que lo sobara por encima de su truza. Jackson: ven Nandito, te gusta? Agarra mi pinga y les dijo a los otros que esperan, saquense la ropa? Ellos comenzaron a desnudarse y yo estaba petrificado, me temblaban las piernas y sentía que él corazón me iba a salir por la boca, después iba viendo cómo se quedaban desnudos esos 4 muchachos delante de Nandito y él todo calatito y paradito e inocente en frente de ellos, todos quedaron calatos, Jackson agarró a Nandito y le puso de rodillas frente a ellos e hizo que agarrara la pinga del amigo de Abelardo y se lo meta a la boca a la vez que agarraba su pinga y lo sobaba, Abelardo se puso atrás de Nandito y comenzó a abrir su culito y a tocarlo, todo lo que en un momento sentía pasó a excitarme ya que veía a todos calatos y manoseando a Nandito y veía que a él le encantaba. Alberto: vamos Nandito abre el culito que quiero pasarte lengua, Alberto abría el culito de Nandito con sus dos manos y les decía miren muchachos está delicia, que lindo culito tienes Nandito! Y comenzó a lamerlo un rato, Nandito tenía en la boca la pinga del amigo de Alberto y con la lamida de culo que le daba Alberto él se retorcía de placer. Albert: listo! Ya está listo para recibir pinga y hoy seré el primero. Alberto hizo que Nandito se pusiera de posición de perrito y escupió en su mano para ponérselo en su pinga y apunto al anito de Nandito para meterlo, lo hizo poco a poco, muy despacio, Nandito cerraba los ojos de dolor. Alberto: shifff tranquilo Nandito, relájate, no hagas duro, relájate y puja así te entrara fácilmente mi pinga, pero se podía ver qué Nandito hacía mucho esfuerzo para que esa pinga pueda entrar y recibir placer, Alberto intentaba despacio, poco a poco hasta que le dijo a Gabriel: abrele el culito así entrará más fácil, Gabriel le agarro de las nalguitas y abría el culito de Nandito y este se resignaba a abrirse. Nandito: au siento mucho dolor! Me duele Alberto, a lo que él dijo está bien, creo que le faltó más lengua, Nandito quiso sentarse pero Alberto no le dejó. Alberto: noooo quédate así, debo darte más lengüita en el culito para que así pueda entrar mejor y más fácil, y eso hizo, así Nandito en 4 patas y con la cabeza en el suelo comenzó a darle lengüita a ese culito adolorido y rojito, Nandito se retorcía de placer y daba algunos quejidos muy leves. Alberto: Jackson tú qué tienes la pinga más fina ven e intenta meterla tú? Jackson ensalibo su pinga y comenzó a puntear el anito de Nandito, y Nandito no podía tampoco con él sentía mucho dolor. Gabriel: vamos Nandito tú puedes no nos dejes así? Nandito: es que me duele. Gabriel: porque te duele hoy si la otra vez pudiste muy bien con todos y no sentiste dolor. Nandito: es que no sé. Jackson: cómo no vas a saber si la otra vez si pudiste, además te hemos traído chocolate como a ti te gusta. Alberto: sal le dijo a Jackson, déjame ver, abrele el culito, oh algo pasó acá, por qué tienes tan rojo el culito Nandito? O acaso alguien más te hizo algo? Nandito: no nadie, no hice nada! Jackson: déjame ver? Oh verdad, lo tienes muy rojo? Todos se miraron pude ver qué con todas esas preguntas y dudas se les comenzó a bajar su pingas a su tamaño normal. Alberto: mirando el culto de Nandito pregunta: di nos la verdad Nandito, quién más te ha echo algo o te metió pinga hoy? Si no nos dices iré a contarle a tu mamá todo esto. Nandito: no por favor! Mi mamá se enojaría y me castigaría. Alberto: entonces porque no nos dices que te paso o quien más te está metiendo pinga? Nandito: los mira con los ojos llorosos y solo se callaba. Gabriel: ven Nandito! No le vamos a decir nada a nadie pero di nos que te pasó, quien más te está metiendo pinga. Nandito: por favor! No le digan a mi mamá, sino ella se molestará conmigo. Gabriel: entonces di nos pues, no le diremos nada, vamos cuentanos. Nandito: fue el señor Henry, del colegio, me llevo a la parte de atrás y ahí me hizo lo que ustedes me hacen. Gabriel: lo sabía porque la otra vez ví como miraba a Nelsito y a Nandito mientras ellos salían de la escuela. Abelardo: bueno muchachos Nandito está adolorido y no podremos darle pinga por el culito, entonces solo tendrá que mamar pinga y acabar en su boca, todos tenían sus pingas en su tamaño normal por toda la interrogación que le hicieron a Nandito, Jackson agarró a Nandito y los puso de rodillas para que fueran ellos cerca de él y así pudiera chupar sus pingas y terminar ellos en su boca, eso hicieron comenzó Gabriel puso su pinga en la boca de Nandito y comenzó el movimiento de adelante y atrás agarrando la cabeza y direccionando a Nandito, hasta acabar dentro de su boquita, siguió Abelardo, hizo lo mismo y termino dentro de la boca de Nandito, por momentos veía a Nandito querer ahogarse con toda esa leche que salía de ellos, siguió el amigo de Abelardo que tenía su pinga súper parada e iba a llenar la boca de Nandito con todo con leche y ese trozo grande de carne, llamó a Jackson para que le alcance la caja de madera y subió a Nandito encima de la caja, le dijo a Jackson que Nandito se lo mamara mientras el atrás sobaba su pinga en el culito de Nandito y trataba de hundir sus dedos en el culito adolorido de Nandito, la verdad que morbo ver todo eso y sobre todo con esa pinga tan grande y rica que tenía, hasta que ví terminar a Jackson, dió unos quejidos y Zas ohhhhh que rico me vengo y ahí estaba Nandito atragantandose con la leche de Jackson, viendo esto el amigo de Abelardo comenzó a acelerar el ritmo y soltó la leche entre las nalguitas de Nandito ufff que ricooo estás lindo Nandito de verdad tienes un rico culito, por ello todos te lo queremos probar, Nandito solo lo miro y esboso una pequeña sonrisa. Abelardo: ven Nandito hay que limpiarte, pásame el papel higiénico Jackson para limpiarlo y así Gabriel lo pueda llevar asu casa, Abelardo lo limpio mientras él seguía desnudo y los otros se iban cambiando, podía ver el hermoso cuerpo peludo de Abelardo, tan lindo, piernas largas y peludas con un abdomen súper plano y peludo muy lindo, terminó de limpiar a Nandito y le dijo. Abelardo: toma pon tu ropa y esperas un ratito hasta que Gabriel te pueda llevar a casa ok. Nandito: si está bien. Abelardo: toma aquí tienes el chocolate y ya sabes nada de esto a nadie ok, ya hablaremos después ok, tú sabes que te queremos. Nandito: si está bien, y los quedó mirando, yo afuera viendo toda la escena y a la vez envidiando a Nandito porque ellos lo buscan para hacerle todo eso y a mi nooo. Abelardo: anda Gabriel llévate a Nandito con cuidado, y ya sabes chiquitín nada de esto a nadie. Gabriel agarro a Nandito y lo saco de la casa abandonada. Abelardo: haber Jackson cómo es eso que viste al portero de la escuela ver de otra manera a Nandito y a Nelsito. Amigo de Abelardo: a Nelsito también? Aunque está bonito el niño también, deberíamos traerlo y enseñarlo también a él jajaja comenzó a reírse. Abelard: nooo huevón a Nelsito noo es muy flaquito y muy mimado no aguantaría nuestras pingas en cambio Nandito está acostumbrado desde antes jejeje. Jakson: siiii yo ví a ese hombre que los mira de una manera diferente, me.percate de eso pero jamás pensé que iba a tocar a Nandito, es que es más aventado y tiene experiencia en pingas pues jajaja. Amigo de Abelardo: igual sigo pensando que a Nelsito lo podemos acostumbrar también jajaja. Abelardo: ya veremos pero todavía nooo. Bueno amigos así termina esta historia espero sus comentarios y en estos días les envío otro cuando busco de todas maneras ser el elegido siempre por los muchachos saludos.

Autor: NELCOZA Categoría: Sexo Gay

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Regalé a mi mamá y eso cambió mi vida

2023-01-15


Mi mamá era una controladora perfeccionista que siempre me estaba presionando, un día me harte y busque personas en Twitter que quisieran tener algo con ella o bien que se la cogieran, cualquier cosa era buena, me contactaron varios hombres, algunos me mandaron videos de como tenían relaciones, y escogí el que destrozaba más en la cama y el que vivía mas cerca, le dije como podía encontrar a mi mamá, donde trabajaba y todo eso. Pasaron algunas semanas y el tipo logró conseguir una cita con mi madre, mientras pasaba todo eso yo hablaba con el tipo, dándole consejos para que la conquistará. Llego el día de la cita y yo estaba emocionada, esa era la oportunidad para que mi mamá me dejara de joder. Pasaron las horas y el tipo me envió un video de como le destrozaba la concha a mi mamá y una foto de su vagina llena de semen, con un mensaje que decía *Tú querida madre vuelve hasta mañana a tú casa*, recibí un mensaje de mi mamá diciendo que se iba a quedar con una de sus amigas, yo alegre iba a dormir. En la madrugada me llegaron más mensajes del tipo, eran fotos y videos de mi mamá, de como le chupaba la verga, le besaba los pies, mi mamá haciéndole un beso negro, jamás me imagine que iba a ver a mi mamá haciendo esas cosas, tengo que admitir que fue genial la sensación. Llego a la mañana siguiente con el maquillaje corrido y cojeando, le pregunté que le había sucedido y me dijo que se había caído, me dijo que volvería a salir esa noche. Le pregunté al tipo que iban a hacer esa noche, me dijo que mi madre era una facil y que recibiría una sorpresa esa noche, hice mis actividades normalmente. Mi madre se fue y comencé a masturbarme viendo los videos de como le daban verga a mi mamá, pasaron las horas y el tipo me mando más videos, los revisé y le estaban haciendo un bukkake a mi mamá, eran facil 10 hombres bien dotados, mi madre ni siquiera podía abrir los ojos por tanto semen, después comenzaron a cogersela, todos sus hoyos siendo penetrados, hasta sus pies los estaban utilizando. Le preguntaron por mi. -cuantos años tiene ? -16 Es igual de fácil qué tú ? -si -la podemos hacer nuestra? -cuando quieran -puedes hacer que deje de estudiar? -si Todo eso mientras tenía dos vergas en su boca, yo me asuste por lo que dijo, no quería hacer lo que dijeron, pero en el fondo me gustó. Al día siguiente la trajeron, mi mamá regreso en silla de ruedas, dijo que vendrían unos amigos y me quería presentable, me dio ropa, una minifalda, unos tacones, y una blusa que me llegaba hasta el ombligo, yo me sentía nerviosa. Llegaron y yo les abrí la puerta, les serví de comer y cuando terminaron. Uno me agarro del pelo, yo me resistí, me llevaron hasta el baño y entre 5 hombre me empezaron a orinar, me obligaron a tragarme su orina, me rompieron mi ropa, y me hicieron doble penetracion, por mi vagina y por mi ano, fue tan doloroso, sentía que me partían por la mitad, mientras me estaban cogiendo, mi mamá estaba masturbando a 2 hombres, yo llorando, después de que terminaran, me obligaron a chuparles la verga, tenía un repugnante olor, y se corrieron, el semen me salió por la nariz, lo escupi y me empezaron a soltar cachetadas y me lo tuve que comer del suelo, me levantaron y me llevaron a mi habitación, la destruyeron y me amarraron boca abajo y comenzaron a follarme, los 6 tipos que fueron, pusieron su semen en mi conchita, luego llevaron a mi mamá a que me succionara el semen de mi vagina, y me lo escupió en la boca para que me lo tragara, me sentí tan humillada, que volví a llorar, paso un rato y les dije que quería cagar, y me obligaron a cargar boca abajo y en mi cama, me quedé dormida. Al día siguiente desperté con dolor en el vientre y en las piernas, nos dijeron que ahora éramos sus objetos y que vendrían todos los días (cosa que cumplieron) uno de los tipos me dijo que me quería para su vaca personal, no lo entendí en ese momento, paso un mes desde eso y me enteré que estaba embarazada, paso otro mes y me empezaron a crecer los pechos, y desde ese día alimento a todos los hombres con mi leche, solo estoy para atenderlos a ellos y a sus necesidades, mi madre también está embarazada, pero solo yo los alimento, tengo 4 meses de embarazo y apenas tengo 16 años, tal vez el karma llego demasiado rápido, pero realmente disfruto de ser una esclava, si quieren que siga poniendo más cosas de como me follan a mi o a mi madre pónganlo en los comentarios

Autor: Zorrita16 Categoría: Confesiones

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Luces Parpadeantes en la Cuna

2023-01-15


Camilo es puesto a una prueba para medir su depravación antes de permitirle corromper el regalo celestial.. Me gustaría compartirles la segunda parte de la historia que recibí por parte de un contacto en mi Telegram (@carlosparrarojas0) dónde describe algo que le sucedió hace poco. Pero antes, vale aclarar algunas cosas: No sé si es verdad o no lo que me dijo. Yo soy pasivo, el activo era el que me contó la historia. La historia es mucho más larga, por lo que la voy a dividir e ir publicando dependiendo de si gusta o no. El tipo me bloqueó cuando terminó de compartirme su relato. Si estás por ahí, escríbeme de nuevo y fóllame. No había podido subir la historia antes porque tuve unos inconvenientes personales que ya fueron resueltos. A raíz de esos mismos inconvenientes tuve que eliminar la cuenta de Telegram, pero ya está activa nuevamente para que me contacten. No fue nada grave, pero vale más la prevención que el tratamiento. Disfruten la historia, puntúen bien para animarme a compartir las demás partes, compartan para que otros también la disfruten, comenten y escriban a mi telegram @carlosparrarojas0 para hacerme comentarios o retroalimentaciones Sin más preámbulos: La Prueba: Es jueves por la tarde y miro constantemente la foto de perfil del usuario @luces de cuna en Telegram. Hay muchas emociones contradictorias que me invaden y que no me dejan concentrarme en el trabajo. Siento vacío en el estómago, como si el mundo se moviera, estoy desubicado y es poco lo que he podido hacer. Incluso el camarógrafo me ha llamado varias veces la atención porque parezco “pensando en culitos de angelitos”… Si supiera que realmente estoy pensando en el diminuto culito de un angelito que aún no se descarga de la nube jajaja. Lo sé, mal chiste. _”Camilo, terminamos la sesión por hoy. Es mejor que para mañana vengas más despierto y concentrado porque no me puedo quedar todo el día tomándote fotos, el cliente necesita el material ya listo y editado para la semana que viene y tú ahí distraído. Menos mal pude sacar dos muy buenas. Hoy particularmente registra muy bien la bolsa de tu pene. Lo que sea que te tiene así, trata de que siga igual, pero sin distraerte tanto.” A mí sinceramente me trae sin mucho cuidado lo que diga Kale, el camarógrafo. Nunca le gusta nada de lo que hace y cuándo dice un buen comentario lo acompaña con una enorme dosis de críticas destructivas. Si no fuera porque realmente es un excelente fotógrafo y prácticamente sostiene la compañía con su trabajo, hace rato le hubiera dado su puño en la cara para que se quede callado. Salí de la agencia a las 7 de la noche e iba manejando mi carro cuando escuché una notificación de mensaje en mi iPhone 13. No le presté atención. Algunos minutos después el mensaje se volvió llamada, miré y decía “número desconocido”. En ese momento sentí un fuerte corrientazo de energía en mi verga porque, aunque Iván también suele llamarme por números desconocidos, algo en mi interior me decía que esta llamada no era Iván. Estacioné al lado de una acera, en un barrio muy lindo que queda cerca a mi edificio. Respondí la llamada: _”Aló, buenas noches. ¿Con quién hablo?” Se escuchaba una respiración al otro lado, pero nadie decía nada. _”¿Me escucha? Aló.” Repetí. _”Si, lo escucho. Soy el contacto de Telegram. El que habló con usted anoche ¿lo recuerda?” Lector le voy a ser sincero, la voz no se parecía en nada a la personalidad que me estaba chateando la noche anterior. Si bien se escuchaba que era la voz de un hombre, se escuchaba suave, calmada y lenta. Sé que una cosa no tiene que ver con la otra, pero sí me había hecho a la idea de que el depravado de Telegram era igual a mí o un poco menos masculino… Resulta que es bastante menos masculino. _”No, no lo recuerdo. Ayer hablé con demasiadas personas en la noche. ¿Puede ser más específico e identificarse? Estoy manejando”. Le dije. Tenía que comprobar si este tipo era sumiso o no. _”Si, disculpe. No me puedo identificar porque jamás nos presentamos. Soy el contacto que usted siempre ha podido bloquear pero que no lo hace porque quiere disfrutar.” Me resultó curiosa la respuesta. Si bien es evidente que es un hombrecito sumiso, un “faggot”, también se nota que es un depravado sexual que no es capaz de disimular lo enfermo que está. Lo hace casi tan mal como yo tratando de cubrir con mi codo la enorme erección que tenía en ese momento. _”Sí, lo recuerdo. El futuro papá”. Le dije imponentemente. _”El mismo, jajajaja. Lo llamo para decirle que le tengo una prueba. Necesito poder determinar que usted es una persona confiable para que conozca a mi bebé cuando nazca. Diríjase a la calle 67B Sur. #512. Es una casa blanca. Las llaves van a estar bajo la alfombra. Entre y disfrute lo que encuentre. Mientras lo hace, si quiere, me manda fotos y vídeos. No es necesario que se vea su cara, pero que al menos se vea su verga y lo que se está follando para yo poderme masturbar mientras lo admiro jajaja”. Me dijo el sumisito. _”Está loco si cree que voy a hacer eso. No sé quién es ni si me está mandando a una trampa o a mi propia muerte. No voy a hacer eso. Déjese de payasadas.” Le dije desafiantemete. _”No se preocupe, no es una trampa y no le va a pasar nada malo allá. Al contrario, es una deliciosa prueba que preparé para usted. Sin embargo, si desconfía tanto, recuerde que siempre puede bloquearme y no hacer lo que le pido. Tiene hasta la medianoche para llegar a la casa y disfrutar los regalos que le dejé. Si no va, entenderé que no es la persona indicada y seguiré buscando a alguien para coger a mi bebé.” Sin responder nada le colgué. Volví a encender mi auto y seguí rumbo a mi apartamento. “Este tipo está loco si cree que voy a ir a un lugar desconocido para que me pase cualquier cosa” pensé furioso. “Además, ni sé dónde queda esa dirección… Creo que no pasa nada si miro en Maps donde queda. Igual no pretendo ir.” Pensé inocentemente. Abrí Maps. Introduje la dirección y me di cuenta que quedaba a unas cuantas calles del lugar donde recibí la llamada. Era el barrio aledaño al lugar donde me encontraba, pero este otro es menos bonito y parece más un suburbio de la ciudad. A veces paso por ahí para ir a mi apartamento, cuando la vía principal está congestionada. Giré él volante por la siguiente salida a la izquierda y me dirigí a esa dirección. “Sólo voy a pasar cerca en mi carro. Nada más”. Me repetí por todo el camino. Ya estaba cerca del lugar y noté que las calles estaban solas, en las pequeñas casas había luces encendidas, cortinas cerradas y se escuchaban personas en su interior. Supuse que la actividad social se terminaba temprano en esta zona y las personas se retiraban a sus hogares a vivir su vida familiar. Pasé por el frente de la casa que me dijo el loco ese y vi lo mismo, luces encendidas, cortinas cerradas y personas hablando. Me resultó extraño porque yo pensaba que la casa iba a estar sola. Estacioné el carro en un lugar oscuro y me dispuse a observar detenidamente lo que ocurría. Estuve en ese plan aproximadamente 35 minutos y no vi nada extraño. Me decidí a bajarme del carro, acercarme sigilosamente a la puerta y mirar si el número de la puerta sí correspondía con el que me indicaron. De la calle no tenía duda, varias señales de tránsito que pasé lo confirmaron, pero no estaba seguro del número de la puerta. Caminé con cuidado de no hacer ruido, llegué a la puerta y vi una pequeña alfombra sucia que intentaba decir “Bienvenido”, pero que en su lugar decía “Bien ido”… Debí hacerle caso. Cuando vi el número de la puerta “512” supe que sí era la casa. Me dio mucho susto, me di la vuelta y empecé a caminar rápido hacia mi auto. “¿Y si solo es una casa, pero no pasa nada con ella? Voy a mirar si la llave está bajo la alfombra y echo un vistazo a la casa por dentro sin pasar de la puerta. Si soy silencioso nadie adentro lo va a notar.” Pensé. Levanté con cuidado la alfombra y vi una pequeña llave plateada, la tomé, miré para todas partes y no vi nada extraño. Abrí lentamente la puerta y esta cedió en completo silencio. Asomé la cabeza y vi una pequeña sala con tres sillas vacías. Ahí me di cuenta que las conversaciones de personas que estuve escuchando era un programa de televisión que se estaba transmitiendo. Miré otro poco y vi una pequeña cocina, muy limpia y ordenada. “¿Hola?” Pregunté tímidamente. Afortunadamente nadie me contestó porque no hubiera sabido qué responder si me preguntaban qué hacía entrando en su casa “Hola, es que venía en mi carro y pude notar que tienen su llave bajo la alfombra. Es muy peligroso y quería regresarla”. Ridículo. Entré un poco más. Me acerqué lentamente hasta la sala y no vi a nadie. Luego me moví a la cocina y tampoco encontré rastros de personas. No había ningún sonido en aquella casa, solo el ruido del programa de televisión. Entré un poco más y encontré las habitaciones. Dos en total, en la primera no había nadie. Solo una cama impecablemente organizada y un escritorio de computadora con una pc de escritorio apagada. Pero grande fue mi sorpresa cuando en la segunda habitación encontré algo. Una pequeña perrita pincher de color blanco que estaba echada en la cama mirándome. Me resultó muy extraño porque los perros de esa raza suelen ser muy ruidosos y agresivos con los extraños, pero esta no. Solo me miraba quieta y en silencio. Sentía que algo no andaba bien, por lo que volví a recorrer la casa y confirmé que no había nadie más fuera de la pincher y yo. Sonó una notificación de mensaje en mi celular. Recordé que no había revisado mensajes desde la tarde y empecé a ojear: Judea LOGOS: “Es que yo no entiendo ella porqué es así. Desde hace varios días le indicamos que esos logos ya estaban listos y no ha pagado aún.” Sandra Amor: “Jajajaja que genial!” Kale: “Ya revisé las fotos de hoy y pude salvar otras tantas. Creo que hoy fue un día algo tensionante para ambos. Te recomiendo que te relajes, descansa y disfruta del resto del día. Hoy hizo un calor muy fuerte. Hidrátate bien para que mañana le demos a la campaña con toda.” Ximena: “Hace días que no sé nada de ti. No te gustó lo que te hice la última noche?” Ferchito: “Amor, este fin de semana sí vamos a pasarla juntos? Mira que me has tenido muy abandonado y ya ni sé si somos novio o no. Te extraño” Pame: “TIOOOOOO!”. Creo que Kale tenía razón. Hoy fue un día largo y necesito relajarme. Aparte de que hizo un calor horrible en el estudio. “¿Será muy malo si busco algo para beber en la nevera?” pensé. Abrí la nevera y encontré una caja de cartón cerrada con una nota garabateada que decía “Un regalo para el que quiere comer carne fresca”. Entendí la referencia. Tomé la caja con cuidado, la agité suavemente para escuchar qué tenía (admito que pensé que era una bomba) y alcancé a escuchar un leve sonido líquido entre vidrio y algo compacto que se movía en su interior. La abrí y encontré una preciosa botella de whisky junto con dos cd’s. Miré por la ventana para ver si alguien venía, apagué las luces y bebí una copa de licor, luego me acerqué a la primera habitación que había encontrado y encendí el computador para introducir los cd’s. Serví otra copa de whisky y me la tomé como si fuera agua. Ya estaba sintiendo el mareo. Puse uno de los dos cd’s. Y se abrió una carpeta con un único archivo .mp4, lo abrí y era un video de un hombre metiéndole la mano por el culo a un perrito de esos caresapo (los pug). Amigo que estás leyendo esto, te juro que jamás había visto tanta belleza. Ver como el ano de ese can se tragaba toda esa mano sin problema alguno, la forma como dilataba, lo inflamado que se veía, el sonido que hacía… me serví otra copa y me saqué la verga para empezar a masturbarme. Ya no me importaba si me encontraban en casa ajena y me acusaban de allanamiento, este video era oro puro. describiré un poco más el video: la perrita era un pug, color beige claro, estaba echada en una cama, estaba boca abajo y tenía las patas de atrás abiertas entregándole su enorme ano a la mano que estaba entrando y saliendo sin dificultad. La perrita de vez en cuando miraba a la cámara y agitaba su pedacito de cola corta para luego volver a recostar su cabeza sobre la cama y disfrutar el espectacular masaje rectal que le estaba dando ese hombre. Más adelante se vio como el tipo sacó su mano completamente de ese enorme agujero, lo contemplo por unos segundos, se veía jodidamente espectacular y destruido, acercó su boca a ese montón de carne inflamada e inundado de placer empezó a chupar el roto trasero de esa hembra. Estuvo en esas aproximadamente 3 minutos hasta que volvió a meter la mano y a fistearla con fuerza. Yo para ese punto ya sentía los tragos en la cabeza y quería otro más. Subí mis pantalones hasta mi cadera, pero no me guardé la verga, salí de la habitación con la cuarta copa de whisky en mi mano izquierda y masturbándome con la mano derecha. Iba por la perrita pincher para pegarle la cogida que jamás le habían dado en su miserable vida de perra. La vi echada en la cama, me acerqué y le puse mi mano derecha en su hocico para ver si me iba a morder o no. La perrita olió mi mano, se puso de pie y se quedó mirándome. A esta putita ya le han enseñado a reconocer el olor de la verga de los machos humanos. Me bebí mi cuarta copa de licor, puse el cristal en el suelo y levanté la perrita para salir con ella al cuarto donde estaba el computador mientras me iba masturbando. Me senté en la silla del escritorio, volví a poner el video y empecé a meterle los dedos por la vagina al animalito mientras yo me masturbaba. Tenía la verga tan dura que podía jugar béisbol con ella. Sentía suavidad, la humedad y el calor de la vagina de la perrita. La hembrita me estaba dando permiso para penetrarla. Me escupí la verga para lubricarla con mi manos, mientras le chupaba la vagina a mi pequeña compañera de la noche. Ya cuando sentí que ese coñito estaba lo suficientemente abierto para meter mi lengua, la puse en posición y empecé a enterrar mi verga. Lentamente el animalito se fue tragando centímetro a centímetro la parte superior de masculinidad. Aunque el alcohol ya me tenía caliente la sangre y aturdido el cerebro, recordé el segundo cd. Sin dejar de follarme a la perrita con los 7 cm que le entraban fácilmente, coloqué el segundo cd y también se abrió una carpeta con un único archivo .mp4. Lo empecé a reproducir y en el vi la escena de sexo más gloriosa que jamás había visto hasta ese momento. Ni el anterior vídeo del perro era tan sublime. Vi a un hombre, alto, joven, de cabello rojo o rubio, que tenía una sudadera holgada color gris y la llevaba hasta la cintura y creo recordar que tenía una camisa roja o vinotinto. Algo así. La parte más atractiva de toda esa escena era el bebé… ¡Si! El tipo tenía un bebé y le estaba metiendo su verga por ese culito. Escuchaba los gritos y llantos del bebé, mientras yo enterraba más mi verga dentro de la perrita quien también empezaba a llorar tímidamente. El chico del video le daba verga a ese bebé en todas las posiciones: Encima, de lado, debajo… Simplemente lo estaba disfrutando como quería sobre esa cama. Al final eyaculó dentro del intestino de ese niño, lo desclavó y le limpió el culito untado de sangre y semen. Evidentemente volví a repetir el video, empecé a beber whisky directamente de la botella para luego empezar a follarme a esa perra imaginando que era ese bebé del video. Llegué a un punto que estaba tan extasiado y borracho que le metí toda mi verga a la perra, que ya desde hace rato estaba chillando durísimo, no me importaba. Así me voy a follar a ese niño cuando nazca y su llanto me animará a que le destruya más el ano. Recuerdo que varias veces sentí que con mi verga le rompía cosas al animalito en su interior, pero yo estaba ciego de placer y solo quería ser yo quien penetrara a fondo ese bebé. Luegó dejé de escuchar a la hembrita, la follé con mas fuerza hasta que por fin la preñé. Saqué mis 22 cm de su cuerpo y caí en el suelo de aquella habitación completamente ebrio y sin energía para hacer algo. Me quedé dormido con los llantos del bebé del video de fondo… Un fuerte destello de sol me estaba pegando en la cara, me desperté asustado porque pensé que alguien ya había llegado a la casa y había encontrado semejante espectáculo que había hecho la noche anterior, pero grande fue mi sorpresa cuando al despertar me encontraba en la parte de atrás de mi carro y al lado del edificio donde vivo. Rápidamente me senté y traté de recordar todo lo que había echo antes. con muchísimo esfuerzo por el dolor de cabeza pude recordar todo lo que acabo de describir, pero no recordaba en qué momento había llegado al carro y había manejado hasta mi apartamento. Revisé mis cosas; billetera, celular, papeles de conducción, mi ropa… Todo estaba completo y en buen estado. Revisé mi pene y extrañamente estaba lavado y oliendo bien. Miré la hora en mi celular y vi que eran las 11:13 de la mañana “¡Mierda, yo tenía que estar en la agencia a las 7 de la mañana. Kale me va a matar!” Grité furioso dentro del carro. Sandra Amor: “Camilo dónde estás metido? Iván te necesita urgente en la agencia” Luces de Cuna: “Que hombre tan pesado eres, casi que no te llevo al carro” Kale: “Camilo, se supone que hace 17 minutos empezaba la sesión de fotos y usted no está por ninguna parte. Sea más serio hermano y al menos diga que se va a demorar en llegar o que no va a llegar. Respete.” Alcancé a leer en la miniatura de los mensajes de telegram. Como pude arranqué mi carro y salí para la agencia… Entre la confusión, la rabia y el dolor de cabeza no alcancé a notar el mensaje de mi depravado amigo. Recuerden puntuar bien, comentar, compartir y escribirme a mi telegram @carlosparrarojas0 Un abrazo.

Autor: DRAGONDERA2 Categoría: Sexo Gay

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Mi hijastra Laura.

2023-01-15


Laura revolucionó mi vida. Quiero empezar contando que tengo actualmente 55 años. Conocí a Marcela cuando teníamos yo 25 y ella 34 años, tenía una hija de un matrimonio anterior,. Llamada Laura, Soy panameño, y vivía en la ciudad. Desde muy joven siempre me gustaron las mujeres maduras o mayores que yo. Estaba encantado con Marcela,, pero me di cuenta que la vida de casados era difícil. Marcela trabajaba como enfermera, y tenía turnos rotativos. Eso abrió una brecha en nuestra relación. Y empezó a iniciar una buena relación con mi hijastra Laura, el padre de Laura, apenas su madre se casó conmigo, se apartó de la vida de ellas, hasta dejó de dar dinero para su hija. Yo me hice cargo de todo los gastos de Laura compartidos con su madre. Pasaron unos años, hasta que Laura entró a primero de primer ciclo. Debo confesar que Laura ya tenía tetas medianas una cinturita muy bonita y su mejor atractivo eran sus caderas y muslos, coronados con los dos hoyitos de la espalda baja. Siempre la vi muy hermosa, pero sin ningún morbo. Una tarde llegué más temprano del trabajo. Y me encontré a Laura Dormida en el sofá de la sala en brasier, uno de sus pesones se había salido rosado, tierno y el pezon muy chico, y solo tenía un short que usan debajo de la falda del colegio, no pude evitar ver su entrepierna, su coño estaba bien marcado, como si se estuviera comiendo el short, podía ver claramente la forma de sus labios vaginales. Mi pinga se me puso dura inmediatamente, me acerqué más a ella, me quedé mirándola muy bien, y de pronto reacciono, ya tenía una mano en la pinga, sobandomela, me avergüenzo de mismo,por tener esos pensamientos con mi hija, y me voy a duchar. Mi mente volvia una y otra vez a él coño de Laura, y yo trataba de pensar en otra cosa. Así pase toda la tarde, hasta la noche, queriendo simular que no vi nada. En la noche quize culiar bien rico con mi esposa pero ella estaba fría y solo quizo culiar un poco y se fue a dormir. Yo quedé con ganas, quise hacerme una paja, pero a ella le molestaba que hiciera eso, me levanté para ir al baño y pajearme,solo caminé sin razonar y me encontré y en el cuarto de Laura, la vi dormir un rato, y luego ya me la imaginaba como sería sin short, como sería su coño, si tendría mucho o poco pelo, si tenía el coño rico,calentito, o mojadito, pero a la vez tenía miedo de estar ahí, pero más fuerte era mi ganas de pajearme,a si que saqué mi pinga por el ziper del pantalón y me la empezé a jalar ahí, no demoré mucho, y se me salió prácticamente sola la leche, me fui a duchar, mientras me recriminaba lo enfermo que estaba. Ahí fui cayendo en un espiral de intensos deseos por mi hijastra y luego sentirme miserable. Hasta una noche, sin planear nada Laura y yo veíamos unapelicula por TV, yo estaba acostado en el sofá, y ella dijo que quería acostarse, le dije ven acuéstate conmigo. Y nos acostamos juntos.sentir su calor, su piel suave y tersa, me hizo tener una ereccion. Sentí que mi cuerpo se puso muy caliente, empeze a temblar y el corazón a latir a mil. Mi pinga muy dura, se la fui colocando en el culo, yo tenía un short de fútbol, sabía que ella lo podía sentir, mi mano la puse en su brazo, y la empiezo a acariciar, mi mano pasa a su barriga, subía y bajaba, lentamente la fui metiendo debajo de su blusa, su piel calentita me excitaba más, subía y bajaba cada vez subí un poco más, hasta llegar a sus senos,al sentir su redondes, en mis manos, ella no decia nada, veía la película, podía oírla suspirar y entrecerrar sus ojos, me daba valor para seguir, note que no tenía mucho pezon, con las yemas de mis dedos los acaricie, tenía los dedos fríos, del miedo y la excitacion a la vez, seguí acariciando sus tetas, y de pronto mi mano quiere bajar y bajar, acarició sus muslos y vuelvo a subir, mi boca busca su cuello y empiezo a rozar mis labios en su cuello, luego a pasar mis labios por su oreja y luego a besar y lamer su cuellos orejas, me voy prendiendo aún más, mis manos entra entre el short y su panti, busco su coño y lo acarició por encima del panti, ella suspira, mordisqueo su oreja y se surro más mi pinga a su culto, saco mi mano y bajo poco a poco su short, subo su suéter dejando sus tetas afuera, la volteo boca arriba, ya que estaba de lado, y me voy directo a besarla ella me corresponde torpemente, lo único que imagino es que nunca habia besado, beso sus labios y voy bajando por su cuello, mis manos acaricia su coño, su clitoris, con mi boca busco sus tetas, que apenas se alumbra con la luz del televisor, me meto una en la boca y empezó a chuparsela, ella ahora gime aun más, eso me enloquece y se las mamo muy rico, bajo por su barriga y encuentro su poquito monte venus, casi no tiene pelos, bajo su panti y paso el primer lenguetazo ella se retuerce y yo separó sus piernas y empiezo a lamer, su clitoris ya la tenía mojadita, no tiene sabor, y le hundo mi lengua, ella se retuerce, se la chupo más, siento como sus piernas empieza temblar y a gemir se la chupo más duro y ella me agarra de la cabeza y después se queda muy quieta. Ella se levanta del sillón y se va a su cuarto. Yo quedé sentado pensando que paso. Al rato la oigo en la ducha, mi pinga hasta se me cayó. Al poco rato escuché el auto de mi esposa y tu e que quedarme tranquilo. Esperé a que mi esposa se viniera a acostar, me desnudé y empece a besar su espalda. Ella me dijo que estaba cansada y quería dormir. Mi pinga terminó por caerse, me enoje y le dije que dormiría solo. Ella se voltio y se acomodó a dormir. Más enojo me dió, tomé si almohada y me fui a dormir a la sala, pero todo lo que había pasada en el sillón, no me dejaba dormir, me empezó a calentar de nuevo, esta vez tomé valor y subí a la recamara de Laura y me dije, es tu hijastra, no tu hija, entré y cerré la puerta con seguro, me desnudé y me acosté a su lado, le quité la sabana, ella estaba boca arriba dormida, empeze a pajearme, mientras con mucho cuidado le bajaba su blusa, sus tetas quedaron al aire, se la empezó a chupar, ella dormía, mi corazón latía muy rápido y empeze a escuchar su respiración cambiar. Bajé lentamente por su abdomen hasta llegar a su short, separe sus piernas y le baje su short de pijama, me puse en posición y se la empeze a mamá encima de su panti, que rico se la sentía, su respiración era más profunda, yo le puse su panti de lado y al fin podia sentirme bien su coño, se la empeze a mamar, ella seguía dormida, su coño se le mojaba, y yo se la chupaba toda, a mi ping le puse saliva y se la empeze a surrar en la micha, su calor me jugaba mal, me quería sacar la leche, así que paraba y volvía, se la surraba desde el clitoris hasta la entrada del coño, y poquito a poquito le metía la cabeza, se la sacaba y se la volvía a hundir, se la surraba y se la metía un poco,, lentamente se la fui hundiendo hasta meterles toda la cabeza, se la deje un rato ahí y volvia a empujar un poquito luego paraba y se la volvía a hundir, su coño lo tenía bien estrecho, como si lo metiera en un guante que queda justo, me apretaba la verga como nunca antes lo había sentido, bien húmedo y caliente, se la metí toda y se la deje adentro, luego se la saque lentamente y se la volvia a meter, empezó con el mete y saca hasta que me empeze a venir, se la tiré en la barriga y luego con mi suéter la limpie. Ella se voltio a dormir y yo me fui a la sala. Continuará

Autor: Jorge Categoría: Incesto

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La tormenta

2023-01-15


Las tormentas siempre me han dado miedo. Por eso cuando hay truenos, vientos fuerte y relámpagos, no me gusta estar sola. Mi marido había viajado y volvería en dos días cuando esa noche Bruno nuestro hijo, al escuchar que diluviaba se vino a mi pieza y sin hablar se acostó a mi lado. Estaba agradecida que no me dejara sola, aunque al ponerme de lado y sentir su pecho pegarse a mi espalda supe que estaba en problemas. Bruno tiene 18 años y ya está grande, de todos lados Cuando apoyó su cuerpo al mío, sentí que pija desnuda en mis nalgas. - Abrazame fuerte, le pedí sin pensar. Su calor me confortaba El se pegó más a mi y cruzando un brazo por arriba de mi cuerpo, se agarró de mis tetas. Si hay algo que me calienta mucho es que toquen o chupen las tetas. Se me paran los pezones, se me ponen más duras y me mojo sin poder evitarlo. Supongo que lo notó. Porque me apoyaba por sobre la bombacha su pija durísima en mi entrada trasera. Lo sentí moverse suave y ya no podía ni quería parar. Lo dejé que me empape con sus jugos todo el culo, y cuando apretando mis pezones lo sentí que me corría la bombacha, supe que me iba a cojer Me la volvió a acomodar en la entrada del culo, y mientras me sobaba las tetas que había sacado fuera del sutien. Me llevo a un éxtasis increíble y sola me fui enterando esa hermosa y dura poronga en mis entrañas. Ya genia sin pudor cuando me preguntó - Estás bien mamá? Mi nivel de perversión llegó al cielo. Solo le dije - Cojeme. Cojeme toda Me volcó boca abajo, me montó sin sacarla y me empezó a dar una cojida que me hacía delirar. Sentía que su pija estaba enorme y me llegaba al fondo del culo, haciendo que a cada metida me salgan pequeños gritos que lo calentaba más y mas Me cojió por más de 20 minutos a buen ritmo y me la enterró hasta donde nunca había tenido ninguna pija para soltar una cantidad de leche que me desbordó el culo y chorreaba hasta la cama pasando aún tibia por mi concha Para mí suerte sus 18 años le permitieron recuperarse cuando se la mamé un poco. Me hizo poner de perrito y desde atrás me empezó a cojer por la concha agarrado de mis tetas. Me hizo acabar dos veces sin pausa, me hizo gritar y cuando me volvió a acabar, caí rendida en la cama. El me dió unos pijazos más y se le salió. Al otro día aunque ya no llovía, cuando despertamos me volvió a cojer por los dos agujeros antes de irnos a bañar, transpirados y con olor a sexo.

Autor: Sonia Categoría: Incesto

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Alan: La primera vez que vi a mi padre usando tanga part 1

2023-01-15


Descubrí que a mi padre le gusta usar pequeñas tangas . Alan: La primera vez que vi a mi padre usando tanga part 1. El relato es corto, pero es dividido en varias partes. Empieza algo lento, pero es para entrar en contexto. Poco a poco ira subiendo de temperatura. La primera vez que vi a papá usando tanga part 1 Mi nombre es Alan y todo comenzó a la edad de seis años. Yo soy adoptado. En la casa hogar dónde viví hasta los seis años me dijeron que mis padres biológicos murieron en un accidente y no supe nada sobre ellos. La historia empieza con Álvaro, mi padre adoptivo. Mi padre es un hombre de negocios, tiene varias ferreteras y dos compañías de construcción. Por razones del destino quería adoptar un hijo. Cuando lo vi por primera vez me pareció un hombre agradable, fue varias veces a la casa hogar a ver los niños y de alguna manera me eligió a mi. Cuando por fin llegó el día oficial de la adopción me recogió y me llevó a su departamento. En todo el camino me contaba lo feliz y emocionado que estaba por ser padre y me pidió que le dijera papá en todo momento. El me decía bebé. El departamento era muy grande. Era un departamento de soltero. Papá en ese entonces era igual de apuesto que en la actualidad. Muy alto, de cuerpo trabajado, con grandes brazos y piernas y claro un trasero relleno y firme. llegamos al rededor de las 6 de la tarde. Me enseñó el lugar y luego me llevo a conocer mi habitación. La había decorado con imágenes de super heroes y autos. Le pidió que me bañara y me alistara. Papá había comprado ropa más o menos de mi talla. Cuando terminé de bañarme y fui a mi armario me di cuenta que había olvidado comprar ropa interior. Fui a decirle y mi padre muy apenado se disculpó diciendo que lo había olvidado. Me dijo que buscará en su armario algo de mientras y después de la cena iríamos a cómprame ropa interior. El se quedó en su oficina trabajando en su computadora. Fui a la habitación de papá y comencé a buscar algo. Había un cajón con pocos boxers pero me quedaban muy grandes como era obvio. Seguí buscando en los demás cajones hasta que abrí uno con prendas muy extrañas, en ese entonces no sabía lo que eran los jockstrap. Tomé uno pero no le vi forma, y no me gustó que en la parte de las nalgas solo hubiera dos tiras. Seguí buscando y abrí otro cajón, había más prendas, pero las pequeñas, eran tangas, había de muchos colores y como eran más pequeñas que lo demás pensé que podría usarlo un niño, pero también se me hacían raras, que solo una tira diminuta no cubriría nada de mis nalgas. Tomé una azul y baje a enseñársela a papá. — Papá encontré esto pero no sé cómo es. Papá al ver qué tenía colgando una de sus tangas en mi mano abrió mucho los ojos y se sorprendió. —No bebé, esa no. Dónde la encontraste ? —Estaba en tus cajones. Papá se frotó el rostro preocupado. —Esa no es ropa para niños, bebé. Se levantó de su silla y camino hacia lo con nerviosismo y me pidió que se la diera lo cual hice. —Esto no lo puedes usar. —Por que? —Por que esto lo usan los hombres grandes, como papá. Cuando crezcas podrás usarlas. Vamos a buscarte algo. Papá estaba muy nervioso y con culpa. Me dio un brief, pero también me quedaba grande. Me dijo que con la ropa no se me iba a bajar y que solo era mientras estábamos en la cena y después me compraría mucha ropa de mi talla. Salimos a cenar. La cena fue agradable. Muchas mujeres y hombres saludaban a papá y por qué no ? Si es muy apuesto. Al terminar solo tuvimos una hora en el mall para comprar. Me compró muchas trusas de super héroes y de otros dibujos. Al salir de la tienda comenzó a llover así que rápidamente fuimos a casa. Cuando llegamos guardamos mi ropa y pude usar una trusa de mi talla. Papá me dio un beso de buenas noches y me arropó y me prometió que al día siguiente iríamos todo el día a varias partes. Luego salió de la habitación. Yo me quedé dormido. Pero a mitad de la noche un trueno me despertó. Salí de mi cuarto y atravesé el pasillo hasta la habitación de papá y toqué la puerta. —Que… Que pasó bebé? —me dijo nervioso. —Pasa. Abrí la puerta y vi que traía el control de la tv en la mano y traía expresión de haberlo pillado en algo. Tenía su computadora aún lado y unos papeles y estaba tapado hasta la cintura y no traía playera. —Tengo miedo. —le dije. —No te preocupes bebé, papi está aquí para cuidarte. Ven acá. Quitó la laptop y los papeles y pide subirme a la cama, pero cuando me iba a abrazar se quedó quieto. —Por que no traes tus juguetes y jugamos un rato. Anda ve, aquí estaré esperandote mi bebé. Bajé de la cama y salí feliz de la habitación, pero a mitad de camino me regresé para preguntarle que tipo de juguetes. Cómo deje la puerta entre abierta antes de hablar vi que cerraba la laptop y salía de la sábanas. Traía una tanga puesta. Una tanga azul, la misma que yo encontré. Pude ver su cuerpo semi desnudo. Unos pechos enormes, sus pezones estaban muy parados. Si abdomen estaba muy marcado, sus piernas grandes y musculosas y lo mejor, la tanga pequeña casi reventaba de la tremenda erección que tenía y podía ver unos enormes, rellenos y firmes huevos. Me quedé hipnotizado. Se dio la vuelta y pude ver su enormes, rellenas y voluptuosas nalgas. Comencé a sentir cosquillas en mi pequeña verga. Sacó un pantalón deportivo y se lo puso. Tomó el control de la tv y la encendió y pude escuchar como alguien hacía unos ruidos extraños, no sabía que eso eran gemidos. En la cabecera de la cama tenía un cuadro de un paisaje nevado y se podía ver el reflejo de la tv y se veía como una mujer estaba abierta de piernas mientras un hombre le metía su verga en lo que en ese entonces pensaba que era su cola. Pero cambió de canal y puso uno de deportes. Regresé a mi cuarto muy confundido y con una sensación extraña. Tomé varios juguetes y regresé con papá ya casi no se le notaba la erección. Me dijo que pondría caricaturas y que jugará yo solo mientras terminaba su trabajo. Después de un rato cerró la laptop y dejo los papeles en una mesa aún lado de la cama y se puso a jugar conmigo. Después de un buen rato hice como si tuviera sueño, me dijo que durmieramos. Dormí abrazado por papá. Me hice el dormido mucho tiempo. Una hora después sentí como se bajaba el pantalón, se lo quitaba y lo dejaba a un lado. Cuando de mucho escuché que roncaba abrí los ojos y con cuidado quite la sábana. Estaba solo en tanga. Pero no tenía erección. Pero aún así se le miraba un bulto enorme. Sus huevos que parecían globos de agua se veían exquisitos. Con cuidado los agarré con mi mano y comencé a frotarlos mirando de vez en cuando si papá despertaba. Mi verga pequeña comenzó a crecer y no sabía que pasaba. En una de esas apreté más fuerte esos huevos… — Bebé que haces ? Me dijo aún adormitado. — Papá por qué tus huevos están muy grandes. Me quitó la mano de sus huevos acariciándola y tragó saliva. — Bebé eso no se hace, no debes tocarle los genitales a los demás. Me seguía acariciando la mano. — Los que ? — Los huevos, eso no se hace. — Pero es que me papá por qué los tienes muy grandes? — Por eso, por qué estoy grande, cuando crezcas también te van a crecer los huevos y la verga. — Así como los tuyos? —Si. Pero no debes hacer eso es malo. Hablamos por la mañana. Ahora duerme. — Papá puedo jugar con ellos? Puedo tocarlos más ? Solo un ratito más mientras duermes. Me volvió a acariciar la mano. —No. Te dije que eso no se hace. Me meteré en un lío. —Por que papá? —Si las personas se enteran de esto ya no podré ser tu papá y no quiero eso, tu eres mi bebé. Se que tienes curiosidad, pero no sé puede. —Solo un ratito y no le digo a nadie. Papá aspiró fuerte. Luego me miró preocupado. —De acuerdo, solo por qué tienes curiosidad. Me apretó la mano y luego la soltó. Llevo sus manos a su nuca y separó un poco más las piernas. Comencé a tocarlo despacio, apretaba suavemente, se sentía muy rico y a papá le gustaba, por qué cuando desvíe la mirada a el estaba con los ojos cerrados y la boca abierta y hacia ruidos (gemidos) pero muy bajos. Apretaba con fuerza y luego suave y sin avisar apretaba de nuevo fuerte fuerte y eso hacia que papá se estremeciera. Comencé a notar otro bulto, era su verga que despertaba y en cuestión de nada la tenía bien parada. — Papá… Soltó un pequeño gemido al mismo tiempo que decía… —Si? Qué pasó bebé? — Tu pipí (verga) esta muy grande. Pero papá no me hizo caso. Comenzó a decirse a si mismo cosas como: esto no se debe hacer, que es lo que estoy haciendo?, soy un mal padre. No sabia que le ocurría así que me dio curiosidad de tocar la verga de papá. La apreté con fuerza y en eso papá gimió mas fuerte y luego me quitó la mano de su verga. — Ya, suficiente. Espero que te hayas quitado la curiosidad por que será la única vez. Ahora duerme. Se levantó de la cama y se colocó de nuevo el pantalón deportivo y regresó a la cama. No supe cuánto tiempo me quedé dormido pero me despertaron unos pequeños gemidos. Abrí con cuidado los ojos. Era papá. Estaba en su silla de escritorio, estaba desnudo, traía su tanga en el cuello y se estaba dando una jalada. Podía ver su enorme verga y sus huevos rebotar violentamente. Después de unos minutos salió de la habitación. Con cuidado deje la cama sin hacer ruido y bajeé a la sala. Papa estaba en un sofá. Se jalaba la verga con fuerza. Sus huevos rebotaban sin control. Y en un gemido que parecía un gruñido soltó chorros de leche llenándose el pecho. Yo estaba maravillado y con mi verguita parada. Papá descanso un poco, hasta que su verga volvió a dormir. Se levantó y yo presuroso corrí a la habitación. De rato entró, tomó una toalla y se limpio la leche de su pecho, se quito la tanga del cuello, se la volvió a poner, también el pantalón deportivo y regresó a la cama. Yo fingí que giraba poco a poco, lo abracé, me rodeo on uno de sus brazos y dormimos plácidamente. Tenía esas imágenes en mi cabeza y me hacían sentir extraño y agradable al mismo tiempo. Desde ese día, al ver a mi papá tan feliz jalándosele decidí hacerlo mas feliz y me puse una idea, de los días siguientes poder jugar con su verga y con sus huevos. Es un relato de varias partes. Se que comienza lento, pero es para que conozcan como se va desarrollando la historia y como poco a poco va subiendo de temperatura.

Autor: ELCHICODELATANGAROJA Categoría: Sexo Gay

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Mi hermana me deslecha

2023-01-15


Mi historia será muy breve, mi hermana es una puta que con tal de que le invites unas cervezas te da las nalgas, un día me invito a su casa por que ocupaba que le arreglara su carro, estuvimos solos ella y yo en su casa todo el día por que sus 2 hijos estarían en un campamento fuera de la ciudad. Mi hermanita tiene 36 años y yo 29, desde siempre le he dicho cosas morbosas y no me dice nada, al contrario como que se excita que le hablen así, ella fue a su cuarto por que se iba a meter a bañar y yo le dije que si por que no nos bañamos juntos como en los viejos tiempos, ella sonriendo me dijo que no por que era un día peligroso por su periodo, entonces eso hizo que me excitara aún más de lo que ya estaba, cuando se metió a bañar la muy puta dejo la puerta abierta tanto del baño, como la del cuarto, yo lo que hice fue que me desnude todo y cuando saliera de bañarse decirle cosas cachondas para ver si quería que cogieramos, al salir su reacción fue de gracia, me dijo que que era lo que hacía que me vistiera y que no pasaría nada entre nosotros, yo enojado le conteste que no se hiciera la santa y que fuera cooperando. Me acerque a ella y como estaba completamente desnuda le empecé a mamar las tetas, ella entre enojada y cachonda me empieza a rasguñar, yo la tumbo de un empujón hacia la cama, le abro las piernas y de un golpe le meto mi verga hasta el fondo, ella entre llorando y gimiendo me dice que parara, que hoy no era un buen día para tener sexo, yo la agarre del cuello y en cuestión de minutos fue que me vine dentro de ella sin compasión, me la estuve cogiendo así como por 2 horas más, cuando quede satisfecho le saque la verga y le dije que de ahora en adelante seria mi hermana sacaleche, que no le contará a nadie sobre lo que le hice o subiría todas las fotos a las redes sociales. Comencé a ir todos los días a su casa o a veces íbamos a los hoteles, me la cogia hasta quedarme sin ninguna gota de semen, paso un mes y vimos como las tetas de mi hermana le estaban creciendo más de lo que ya estaban y la panza igual, ella entre llorando y feliz me dijo que por mi culpa íbamos a tener un bebe. Hasta el momento mi hermana esta a un mes de dar a luz a nuestro hijo, lo que no saben las personas es que fue una creación de mi hermana y yo.

Autor: Anónimo Categoría: Incesto

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Miguel y Sofia descubren el incesto

2023-01-15


Continuación del relato familia religiosa hermanos incestuosos. El cuerpo desnudo de Sofia estaba frente a Miguel, completamente visible. Los ojos de Miguel no daban crédito a semejante figura, sus curvas eran tan sensuales que era difícil centrarse únicamente en un área específica, ni siquiera en sus fantasías más privadas pudo imaginar un cuerpo tan lujurioso. Te veo muy callado, acaso mi cuerpo ¿no es de tu agrado? Sofia cubrió sus tetas con un brazo y tapo su zona intima con su otra mano, se la veía bastante avergonzada. Ahí Miguel comprendió que su hermana estaba abriéndose completamente ante él, y que no debía ser fácil para ninguna chica mostrarse así frente a un hombre. Las mujeres tienen muchas inseguridades con su cuerpo, y Sofia no era la excepción. Mejor me visto y hacemos como si nada de esto hubiese pasado, mira hacia otro lado. Había decepción en los ojos de Sofia, mezclados con angustia. Miguel no volteo, sino que desabrocho su cinto y dejo caer su pantalón junto con su bóxer. Ahora ambos estaban desnudos frente al otro. Miguel se acerco y abrazo a su hermana, mientras que su verga erecta hacia contacto con la piel de su abdomen. Luego de un largo abrazo, ambos hermanos se miraron y se dieron un beso, solamente sintiendo los labios del otro. Al separarse un poco de vergüenza había desaparecido del rostro de Sofia, dando lugar al deseo. Me siento sucia, haciendo esto en mi cuarto mientras mamá esta en la casa. Pero a su vez, es tan excitante. Sofia tomo el pene de Miguel y comenzó a acariciarlo, subiendo y bajando la mano, mientras los jugos preseminales salían. Luego de masturbarlo un buen rato, llevo dos dedos húmedos a su boca y se los metió para saborear el flujo. No tardo en poner una cara de asco poco disimulada, al parecer no era de su agrado. Se miraron y rieron por lo bajo, en parte tratando de ocultar el nerviosismo. Esta muy salado, creo que prefiero el flujo vaginal. La boca de Miguel se abrió por la sorpresa de lo que dijo su hermana, y esta aprovecho para besarlo y meterle la lengua. Se besaron como amantes, intercambiando su saliva mientras sus lenguas se movían salvajemente. Las piernas de Miguel tocaron la cama, y ambos cayeron a la misma. Ahora tenía a su hermana completamente desnuda encima de él. Sofia, sin desaprovechar el momento, tomo la verga y comenzó a estimular su vagina, pasándola suavemente por sus labios y haciendo presión en su clítoris con el glande, mientras pequeños gemidos se escapaban de su boca. Las manos grandes de Miguel tomaron el culo de su hermana y lo apretaron, sintiendo sus dedos hundirse en sus carnosos glúteos. Era tan caliente toda esa escena, que sentía que iba a despertar en cualquier momento en su cama, completamente mojado. Sofia mordía su labio inferior, contemplando como los jugos salían de su vagina y caían de forma erótica en el glande de su hermano. Ahora que ambos estamos desnudos, ¿deberíamos intentarlo?, solo para saber como se siente. Sofia sostenía el pene de Miguel, mientras lo movía entre sus labios vaginales, estaba tan húmeda que podía entrar con un simple empujón. Sofia lo soltó y dejo que la gravedad haga el resto, mientras el pene de Miguel se iba perdiendo dentro de la calida vagina de su propia hermana de sangre. Pensar en eso, le provoco un éxtasis a Miguel, el cual nunca había sentido con ninguna mujer con la que había tenido relaciones. Sofia disfruto tener la verga erecta de Miguel llenando su vagina. Luego de un momento donde solo se contemplaron, Sofia tomo las manos de su hermano y comenzó a cabalgar, moviendo las caderas de una forma que una chica inexperta no sabría. Sofia subía su cuerpo hasta que solamente el glande quedara dentro, solo para volver a bajar y tragarlo entero. Parecía como si le estuviera haciendo un pete con la vagina, mientras sus pechos erectos se movían subiendo y bajando. Miguel sintió que su hermana estaba dominando por lo que decidió que esto estaba a punto de cambiar. En un rápido movimiento giro dejando abajo a Sofia, mientras la tomaba por las piernas y comenzaba a cogérsela a su propio ritmo. Su hermana le agarro la espalda, mientras sus uñas se clavaban en su piel, algo que calentaba más a Miguel. Las rápidas arremetidas venían acompañados de unos fuertes gemidos por parte de Sofia, quien ya no podía contenerse de la calentura, mientras la cama se mecía chirriando bajo sus cuerpos sudados. Sofia lo tomo del pelo a Miguel y lo condujo a sus pechos, para que se los comiera, cosa que su hermano hizo sin quejarse. Lamía sus pechos y mordía sus pezones, estirándolos y saboreándolos. Que rico como me coges, ahhhh, quiero que me hagas tu perra. Es verdad lo que decía mi amiga, coger entre hermanos está a otro nivel de placer, dame mas duro que me estoy por correr de nuevo. Sofia arqueo la espalda mientras disfrutaba y se corría dejando la habitación con aroma a sexo. Miguel no aguantaría mucho más, ya sentía el calor acumularse en sus testículos. Aguanto lo mas que pudo y la saco, cuando sintió el calor recorrer su miembro la puerta se abrió y entro su madre, solo para ver como una enorme carga de semen bañaba a Sofia. Sofia descansaba en la cama agitada, semen cubría su abdomen, cara y parte de su pelo, había sido una corrida bestial. Sin embargo tendrían que dar muchas explicaciones luego de eso. Continuara. Espero les haya gustado mi segunda parte del relato, cualquier sugerencia pueden dejarla en los comentarios que con gusto las voy a leer.

Autor: JORGE77 Categoría: Incesto

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