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Sumisa infiel atada y marido cornudo

2023-09-21


Matrimonio con una vida sexual basada en el BDSM, el bondage, y que tienen una relación liberal sexual con infidelidad y juegos de cornudo cuckold. Ese martes de abril era como cualquier otro día, de planes de ir de aquí para allí y con el aburrimiento rutinario de cualquier ciudad. Amigos los de siempre, recorrido el de siempre, horario el de siempre, y las únicas novedades son los correos que vamos recibiendo mi mujer y yo, dado somos matrimonio liberal y abierto sexualmente. De vez en cuando practicamos tríos, intercambios de parejas, y contactamos con amos, alguna ama de vez en cuando, y también otras parejas y matrimonios que les guste el BDSM y el bondage. Aquel martes estábamos pendientes de recibir un correo de un amo con el que habíamos visto gustos compatibles, y nos proponía una idea y fantasía divertida. Nos habíamos escrito un par de semanas, nos habíamos dado los teléfonos para acordar la cita, pero justo cuando iba a revisarlo recibí un audio de voz de mi mujer. “Cariño, he llamado esta mañana a HardRopes y he quedado con él en un bar a las 12 del mediodía. Luego te informo”. Sabía que mi mujer estaba impaciente, pero no me imaginaba que tenía tanta prisa. Habíamos hablado de todas las posibilidades de sexo y morbo que parecía que ofrecía, y no quise estropear la cita que ella había planeado. Entendí que quería hablar a solas, porque no me dije el lugar dónde habían quedado, y yo seguí aquel día con la normalidad de siempre, esperando encontrarnos a la hora de comer y que me explicara qué tal había ido la conversación. Casi me había hasta olvidado de su mensaje, cuando pasados diez minutos de las doce en punto recibí otro audio de voz. “Estamos tomando un café y comiendo un poco. Se le han puesto los ojos como un búho cuando me ha visto. Me he puesto ese vestido blanco ajustado que me llega justo hasta tapar el culo (aquí se oía sus risas). Ahora está en el lavabo. Luego te cuento. Ah, y es guapo y está muy bueno” Entiendo el impacto que le provocó al chico verla con ese vestido. Mi mujer es delgada, tiene un buen pecho, cadera estrecha, de figura muy fina, y aquel vestido le realza la belleza. Siempre que se lo pone van mirando los hombres adultos, y es incómodo para andar porque cada dos por tres se lo tiene que ir bajando, porque se le sube al ser algo elástico. A mí me encanta cómo le queda, está preciosa, y estaba convencido que para la cita iba a poner a mil al pobre chico. Yo seguí con lo mío, inmerso en mis cosas, despreocupado y pasó media hora hasta que volvió a enviarme una serie de audios cortos y escuetos. “Estoy sentada a su lado. Me ha puesto la mano en la rodilla, y la está subiendo”. Dos minutos después me llegó otro. “Ha metido la mano por debajo de mi vestido”. Y luego envió otro acto seguido. “Ya la ha quitado, pero tengo el muslo, y lo que no es el muslo, que me hierve (y si oían risas de los dos)”. Se notaba la clara intención de mi mujer en putearme pícara y traviesa, y en que supiera que estaba dejándose seducir por otro hombre. Cuando me lo hace yo juego haciendo indiferencia y que no le hago ni caso, y la forma de demostrárselo es que yo no le llamé ni le respondí. Hice como si no me hubiese enterado, como si no lo hubiese oído, pero tanto ella como yo sabíamos que el rol de su travesura y mi indiferencia nos encanta a los dos. Se divertía ella al enviarlos, y sonreía yo al escuchar los audios. Me envió un par de audios más que no hace la falta comentar porque ya eran como enfriando la escena sensual, queriendo llamar mi atención también copiando ella mi estilo de la indiferencia, y el último que me mandó era para decirme que salían del restaurante. Supuse que en torno a las dos del mediodía llegaría a casa y me contaría lo que habían hecho, pero apenas habían pasado quince minutos que me volvió a llegar otro audio, ahora ya mucho más caliente. “Cariño, estamos en el parking. Me ha puesto de cara a la pared. Tengo las manos en la pared y las piernas muy abiertas. ¡Como los polis que cachean a los ladrones en las películas! Me ha ordenado que no me mueva, y me va a cachear”. Me quedé imaginando la escena, en un parking solitario supuse o fantaseé, en esa posición sumisa y sensual, manos arriba con los brazos muy abiertos en la pared, hacia los extremos, alejados de la cabeza, piernas abiertas como si dibujara un triángulo, y las manos del chico registrando por sus nalgas, por debajo del vestido, y emitiendo ella algún suspiro o gemido y él susurrando al oído para no ser descubiertos. Debió de hacerlo muy bien mi mujer para seducirlo hasta alcanzar ese punto tan valiente y atrevido, y yo tenía muchas ganas de recibir un nuevo audio para saber qué seguía sucediendo. Me llegó otro en pocos minutos. “Sigo de cara a la pared, y me ha quitado el vestido” Entonces se oía en voz baja la voz del chico ordenando qué me explicara más detalles. “tengo los ojos vendados, y me tiemblan las piernas de lo excitada que estoy. No veo nada, no sé si me ve alguien, esto es muy morboso”. Entonces oí ordenarle que me describiera la ropa. “Llevo sólo el tanga y sujetador morados de encaje que tanto te pone, y los zapatos de tacón de aguja que compramos en la calle Alcázar”. Ahí se apagó el audio. La imaginé tal como se había descrito, y la polla se me puso que iba a reventar los pantalones. Me despertó envidia sana la situación erótica que estaba viviendo, y por el acento en su voz sabía que le encantaba, y que estaba muy excitada. Me imaginé que tal vez el chico le acariciaba la espalda, o las costillas, sin dejar que ella moviera su posado de cara a la pared, dominada, sometida, y a lo mejor besaba o lamía su cuello para mayor crueldad, y me encantó. Volví a recibir otro audio en el que se oía la complicidad sexual entre ambos. Mi mujer preguntó si podía moverse, y al responderle el hombre con un NO dominante escuché a mi mujer exclamar un “vale”, demostrando que estaba de acuerdo, e incluso yo diría mucho más, que le encantaba. Habían pasado diez minutos desde ese audio en que me decía su posado hasta este otro del breve diálogo, y al cortarse este audio me quedé a la expectativa, pensando en un montonazo de cosas. Ahora tenía la incertidumbre de si iba a follar allí mismo en el parking, o si la iba a masturbar, o se irían a un hotel, o vendría para follar en casa. No sabía cuál iba a ser la continuación. Podían ser muchas cosas, y la verdad es que el próximo audio se demoró intencionadamente. Pasó tanto rato que ni miré el reloj, pero al final se reanudó los mensajes. “Estoy en su coche” – me dijo con un tono muy excitada – “Sigo con los ojos vendados, en ropa interior, y estoy atada”. Se oía el motor del coche circulando, y entre el ronroneo del motor oí que el chico le decía que me contará más. Concretamente, le ordenó que me dijera cómo estaba atada, y ella me contó que tenía los brazos a la espalda, atada con cuerdas que le daban toda la vuelta al cuerpo, doblados, con las manos que habían quedado elevadas, cerca de los hombros. El chico le dijo que me comentara si podía desatarse. “No puedo desatarme” – y al añadir “no vendré a comer” se cortó el audio. Yo estaba vestido con mi ropa de calle, y me senté en un banco de una plaza, apoyándome en el respaldo, porque no podía andar con esa bestial erección que me había entrado. Iba a romper los pantalones, como se suele decir. Me dije que me tenía que relajar, pero imaginarme la escena me hacía fracasar todos los intentos, y una parte de mí pensaba dónde iban, pero mi mujer ya es adulta, lista, madura, le encanta seducir y provocar, lo lleva en la genética diría yo, y confiaba en que ella sabía en que iba a disfrutar y pasárselo bien. Todo el rato iba pensando yo a qué lugar bien, si yo tendría que ir a buscarla a algún sitio, un hotel, un piso, una calle, y me quedé totalmente expectante esperando noticias. Tardaron en llegar, pero ya di por supuesto que no iban a decir nada hasta llegar al lugar donde iban, y así fue. Por fin llegó un nuevo audio. “Cariño, ya hemos llegado”. Primero me habló del lugar. “No sé dónde estoy. Tengo todo el rato los ojos vendados, y no sé dónde me ha llevado” – y rápidamente añadió – “pero estoy genial, ¡tranquilo!”. Después me contó que estaba desnuda. Le había quitado toda la ropa, descañza, y que tenía las piernas atadas dobladas como si fuesen las patas de una rana. El talón le tocaba el culo, y no podía estirarlas ni un milímetro. Las ataduras y el bondage eran estrictas y duras, y me contó que se iba a quedarse con él toda la tarde. Había decidido que iba a ser su esclava hasta las siete de la tarde. Imaginarla todo el tiempo atada en esa posición, sin ver nada, sin poder escapar, sometida y torturada por un amo severo y perverso, me encantó. La ideé atada toda la tarde, sin descanso, perdiendo la noción del tiempo al tener todo el rato los ojos vendados, con pausas a veces y a ratos martirizada de orgasmos y placer, y me excitaba. Imaginé la posición que me había dicho porque he visto muchas fotos de ese estilo, y lo hice fue poner en mi cerebro la cara de mi mujer. La imaginé gozando, excitada, y me encontré tan tranquilo que me vino esa modorra de que duermes pero que te entra sueño y vas cerrando los ojos. De pronto volvió a sorprenderme otro audio. Era mi mujer gemir. “Sí, sí, sigue, sigue” – decía, y el chico le ordenaba que me contara qué estaban sucediendo. Se lo tuvo que repetir tres veces, severo y dominante, porque ella no paraba de gemir, y entonces logró contar que le estaba lamiendo el clítoris con la lengua. Le dijo que tenía que obedecer a la primera, y que se merecía una lección. Ella dijo que sí, que la castigara, pero seguía gimiendo, y ahí se paró el audio. Cuando volvió el siguiente audio comenzó con la voz del chico, hablando con mi mujer. Le ordenó que me lo volviera a contar, y al oír sus mmmppfffhhfhhf y mmmmaafffpff supe que estaba amordazada. Y debía de estar muy duramente amordazada, porque no se le entendía nada, y era incapaz de articular una palabra. Entonces hablaba el chico, y en un mensaje dirigido a mí me decía que mi mujer se lo iba a pasar de maravilla, que la iba a volver loca de placer, y que a las siete la desataba y vendría para casa. Añadió que ya enviaría algún audio más, y colgó. Durante toda la tarde fui recibiendo varios audios. Las dos primeras horas todo el rato fue amordazada, y todo el rato gimiendo. Algunos eran orgasmos alocados, “ffffmmpfffifififi mmmppffii”, otros eran como torturada “aaaafffffffhhhfff mmmamafffappp”, y unos pocos eran como diálogos, como queriendo decirme qué tal iba “ffffoooiiii mmmmippfpfifif mmmaaapppffhhoooggg”, todos ininteligibles pero que no entendía nada de nada. Pasadas las cinco de la tarde oí de nuevo su voz. “No tengo ni idea de que hora es, pero me lo estoy pasando de puta madre. Sigue, sigue” – decía desesperada. Sonaba que no hablaba conmigo. Era como un mensaje que le había dado a su amo, y de este estilo llegaron un par más. Uno era misterioso. “Duele, pero me encanta”. Y otro en el que demostraba haber conseguido su obediencia y sumisión, ya que se dirigió al chico como “sí, señor”, y en otra frase añadía el “sí, por favor”. No tuve más audio, así que no supe de que iba el diálogo entero, pero tenía suficiente notando ese acento de excitada y cachonda. Imaginé que habían follado con ese frenesí que es típico estando los dos cachondos perdidos. Imaginé que la había masturbado, y que la estaría sometiendo a esas sesiones maravillosas de multiorgasmos que le encantan a mi mujer, en la que tiene tres o cuatro orgasmos seguidos. En eso le encanta suplicar y rogar que paren, y quedarse un rato atada mientras recupera fuerzas. A lo mejor la sometió a algún castigo, pero todos los detalles me los contará cuando venga a casa. Yo os comentó que había ido repasando los audios. Había elegido varios en los que gemía amordazada, en los que se oía sus orgasmos, y me hice una paja escuchando los audios, fantaseando con la escena, y sabiendo lo bien que se lo había pasado. A las siete y dos minutos volvió a llegarme otro audio. “Me está desatando. Ya vuelvo para casa”. La fui a encontrar en la esquina de las calles Baltazar y Bronto. Tenía muy marcadas todas las cuerdas, lo que demostraba que había estado atada estricta y severa mucho rato, y aún llevaba el dibujo del antifaz de cuero usado para los ojos vendados. Rápidamente se abalanzó sobre mí, nos estampamos un beso apasionado en los labios, me contó que estaba exultante, cansada y agotada también, pero que se lo había pasado maravilloso, y me enseñó orgullosa todas las marcas preciosas que llevaba por todo el cuerpo. Me contó que había llegado con los ojos vendados, y que de verdad no tenía ni la más mínima idea de dónde habían ido, más allá de que se habían metido una hora en coche. Después siguió con todos los detalles, que dio para esa noche y el día siguiente y la semana entera, pero eso ya os lo cuento en otro relato. Autor y propietario del relato: parejasumisa@yahoo.es

Autor: PAREJASUMISA Categoría: BDSM

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Me excita humillar a mi eterno esclavo sexual

2023-05-28


Mi nombre es lo de menos la historia es lo que vale la pena. esto empieza yo era una adolecente de 17 años popula y muy asediada por los chicos pero habia uno que sobresalia viva a tres casas de la mia. desde esa edad estaba obecionado con migo yo francamente lo aprobechaba se llama luis un geimer y raton de biblioteca(nerd) que me hacia los mandados, las tareas me llebaba los libros a la prepa y universidad. en alguna ocasion de madrugada le hable para que me fuera a conseguir un helado y lo hizo sin chistiar. cada viernes tenia una rosa que el me ponia en el parabrisas de mi jeep. era mi presumir con las amigas tener un hombre a mi dispocision. pasaron los años yo tube prometido mi actual esposo. pero cuando llego mi invitacion a su casa el se disiluciono un poco y quizo olvidarme teniedo novia que yo vi salir de su casa eso me hervio la sangre pero iba con mi futuro esposo en eso momentos. y aguante e de dexir que con mi esposo nunca e sido toxica ni celosa. pero con luis me salio el diablo todo el dia estube entregando invitaciones de mi boda pero con mi mente que luis era mi pendejo solo mio. ese sabado estube todo el dia y parte de la noche con familiares mios y de mi prometido. pero el domingo me levante muy temprano sabia que los papas de luis salian y lo dejaban solo por lo que fui a buscarlo traia yo mucho coraje colera y desde que me abrio la puerte me le ... ... fui en cima a insultarlo lo sacudia le pegaba y el no decia nada. le dije que se incara para pedirme perdon por la ofenza y lo hizo. a mi me estaba gustando tener el control absoluto y vi que a luis el humillarle lo exito lo vi en el bulto que se le hiso en su pantalon. no pare continue que me besara los pies yo daba ordenes y el la ejecutaba lo hise desnudarce ponerce una liga de pelo en su pene causarle dolor me humedecia mi bulba. le dije que solo era mio mi perrito, mi esclavo, mi pendejo, eso vi y senti que lo ponia en un estado de exitacion me suplicaba por dejarlo masturbarce que ya no podia mas pero solo quera tocarce ahi yo golpiaba su mano le escupi lo orine en su cara el decia gracias mi ama eso me exito hasta el extasis y le hise que comiera de mi coño hasta explotar en su boca y me diera las gracias haciedome alabanza. se quito la liga y exploto muy fuerte ahi diciedo mi nombre que era su ama y señora. lo hice cortaray jamas tubiera pareja que se conformara con el tiempo que yo tubiera acepto el gana dinero de geimer, y de unosprototipos industrales que hiso patente por lo que gana muy bien y yo tengo su tarjeta de nomina con los que me compro los atuendos y accesorios. yo llevo mi vida normal con mi esposo y un hijo que es de el y otro que cree que es pero es de mi exclavo para tenerlo mas amarrado. ya le puse a luis en sus nalgas tatuaje de mi nombre

Autor: topo76 Categoría: BDSM

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Mi papá me introdujo al sado masoquismo

2023-05-15


Evolución de los encuentros sexuales con mi propio padre. Como ya te he estado contando en mis entradas anteriores, los primeros acercamientos, la exploración y el conocer el placer se dieron a una edad más acelerada que el promedio común, a los 6 años, según recuerdo, y de una de las formas más morbosas, más tabúes, ya que fue con mi odre biológico. Para mí se dio todo de un modo tan natural, que a esa edad nunca se me ocurrió que ésta situación pudiese ser tan “anormal”. También haciendo una recopilación y resumen, el modo de introducción al placer sexual fue de modo paulatino, comenzando quizá años atrás con el tocamiento, disfrazado de higiene, después al roce, a incorporar frotamientos, besos, el sexo oral genital y el beso negro, a cuando mi padre comenzaba a frotar sus yemas de los dedos para estimular mi anito, relajarlo y tratar de cada vez más introducir su lengua o dedo, siempre paraba cuando le pedía que lo hiciera porque me dolía o incomodaba, siempre fue así, hasta que llegamos al momento en el que me penetró por primera vez. Ya en veces anteriores de nuestros encuentros íntimos notaba que me hacía menos caso cuando le pedía parar, en repetidas ocasiones, continuaba introduciendo su dedo índice, o incluso tratando de introducir dos puntas de sus dedos, me hizo llorar un par de veces, pero tanta era su calentura, que cuando le pedía parar el me sujetaba más fuerte, siendo su modo favorito cuando estaba yo boca abajo, pegando el pecho bien al colchón, levantando mi culito, con un par de cojines en la cadera, quedando con mi ano bien ofrecido a disposición de mi padre, decía que le encantaba ver cómo a pesar de la incomodidad me iba dilatando poco a poco. Como te decía éstas veces previas comenzaban con los besos, caricias, sexo oral de siempre, pero una vez él terminaba de lamer mi penecito y zona genital me pedía ponerme boca abajo, ya comenzaba el martirio para mí, porque aunque no quisiera, él se podía poner más agresivo, me nalgueaba, me tomaba muy fuerte de las muñecas o tobillos, incluso fue cuando echaba manos de las cuerdas de shibari (unas cuerdas muy suaves de seda, especiales para poder amarrar al sujeto, generalmente el receptivo, de modo que quede inmovilizado, de cierto modo que sea fácil para el insertivo usar los agujeros a placer, sin tanta resistencia, o sin la posibilidad de que el insertivo se mueva, esto supongo lo traía por herencia cultural, ya que mi lado paterno es del sur de Japón, aunque quizá presumiendo, nuestros penes son más grandes que el promedio por allá). Estando yo su plena disposición con el culo en el aire, amarrado de cierta manera que no podía usar mis brazos ya que estaban anudados firmemente mis codos a mis rodillas y mis brazos a mis muslos, no podía más que llorar cuando él no paraba y continuaba preparándome para la penetración de su paternal verga. Éstas últimas veces podría jurar que incluso disfrutaba el hacerme llorar, podría jurar que su verga se ponía más gruesa, más dura, babeaba más líquido de la punta conforme yo imploaraba que parara, el cariño y cuidado de todas las veces anteriores poco a poco se evaporaba, así como su paciencia para tomar la virginidad anal de su propio hijo de en ese entonces 7 años. Estas últimas veces fueron una vista previa de su sadismo, ya que gozaba de mi siendo humillado, de usarme sin nada de cariño, disfrutaba cuando yo ponía resistencia y tenía que someterme, el hecho de tener que luchar con un cuerpo mucho más pequeño, mucho menos musculoso y fuerte, el tener que cansarme luchando, las lagrimas, el que le implorara que parara y tener de respuestas como “ahora no eres mi hijo, eres mi juguete sexual; no eres nada más que un hoyo para mi uso; te hice para mi placer, esa es tu utilidad; no me importas justo ahora, niño, comenzamos a jugar y continuaremos hasta que yo lo decida”, me miraba a la cara, lamía las lágrimas que rodaban por mis infantiles mejillas y me tomaba con fuerza la cara a modo que creía que me besaría y entonces soltaba un ecupitajo directo a mi boca, ciertas veces éste sometimiento pasaba en la bañera, a modo que él me orinaba en la espalda, directo a mi culto, decía “sólo marco lo que es mío, si otro macho quiere usar éste hoyo sabrá que ya tiene un dueño que lo hizo para su propio placer”. Siendo honestos, ésta situación me generaba sufrimiento, pero de un modo extraño me excitaba, me generaba placer, de un modo más intenso y diferente, me negaba por el dolor, me resistía para darle batalla, pero al mismo tiempo me preparaba entusiasmado siempre, me emocionaba y ponía dura la pequeña verga pensar en lo que me haría, era raro, pero lo disfrutaba. También éstas veces era de estar masturbándose, rozando con presión la cabeza de su gruesa verga, lubricando son sus propios preseminales, notando y disfrutando como ese pequeño ano de un niño de 7 años una relajandose para recibirlo, pero terminaba eyaculando justo en mi ano, haciendo un poco mas de presión, sólo aceptaba sin problema la punta de su verga, siendo que la mayoría del semen quedaba fuera, él entonces hacía esto que aún me encanta, que es tomar con su boca el semen y luego besarme de modo largo y profundo, siempre logra que me trague todo su semen y mezclado con su saliva, mientras me masturba, en ese entonces lograba con una mano tomar y presionar ligeramente la piel de mi peiné (la zona entre el escroto y el ano) y hacer círculos contra el hueso, mientras que con dos dedos me masturbaba, siendo esto una sensación mágica, placer infinito que lleva a un orgasmo que me reinicia la mente, siendo que esto aun a la fecha cuando logramos estar solos, repetimos esto, claro, con la diferencia de que hoy en día soy un hombre tonificado, mas alto, más musculoso y vigoroso, propio de alguien de 30 años, y él, mi sensual padre, ya con un abdomen algo crecido, músculos aún con tono, pero demostrando el paso del tiempo, propios de sus casi 60 años, ahora me pone abierto de piernas, mientras me penetra salvajemente, con una mano me masturba y con la otra presiona el periné o mis testículos a veces rudo, a veces suave… Otras veces él es quien recibe mi verga, que llegó a ser más larga, pero un poco menos gruesa que la suya (Su pene mide unos 18cm de largo por unos 16 de diámetro, la mìa 21cm de largo y 14 de grueso) me es divertido y excitante vengarme del dolor que me hacía pasar, siendo que a veces mientras penetro a mi padre, con sus piernas en mis hombros, suelo ahorcarlo, abofetearlo, jalar su pelo, morder fuerte sus tetillas, escupirle en la cara o en la boca, hacer que el pida un descanso, que vaya más suave e ignorarlo, decirle “ahora eres tu mi puta, papá; eres el juguete sexual de tu hijo, asqueroso pervertido; se que te encanta cómo te humilla tu hijo, puta sucia”. incluso cuando llego al orgasmo en lo profundo del recto de mi padre, ciertas veces puedo pasar su segundo esfínter sintiendo más presión en mi verga, es entonces cuando me gusta orinarle por dentro, hacer que escurra una mezcla del semen de su hijo, su macho, con mis orines, potentes de hormonas de semental que vinieron a este mundo a darle placer a su padre … y recibir y dar placer de muchos, muchos otros hombres, mujeres, sin importar tamaños de genitales, de cuerpos, de edades, de especies animales y vegetales también; obviamente crecí siendo un asqueroso cerdo degenerado con ganas de probar todo lo que se pudiera penetrar y todo lo que me pudiese meter al culo para experimentar placer, eso es lo que importa para mi; desde luego también mi padre de modo voyeurista goza de sobre manera hacer cosas diferentes conmigo, que le cuente mi degenerada vida sexual para masturbarse pensando en lo bien que crió a base de leche paterna a éste cerdo, justo como él. La siguiente entrada ya les contaré de cómo fue la primera vez que me penetró, o quizá de cómo fue mi primera vez probando otra especie… lo de mi primera vez en una vagina ya vendrá mucho después. Coméntame que es lo que te gustaría saber. Muchas gracias por seguir leyendo mis memorias, y sobre todo gracias a los que aún me escriben cuánto es que disfrutan y me describen lo excitado que los pone leer de mi vida sexual, por favor síganlo haciendo, escríbanme y si se puede adjunten evidencia de su orgasmo, estoy en tele gram como @Miankido siempre respondo más fácil después de la media noche hora centro de México. Besos del color que quieran.

Autor: @Miankido Categoría: BDSM

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Nuevas cosas

2023-05-15


Sandra de 38 años, casada dos hijos, 1.60 altura y peso 52 kg. Morocha con pelo al hombro, melenita y ojos gris claro. 95 de tasa en corpiño y buena cola. Muy feliz con mi familia, está soy yo. Meco de 1.85, unos 90 kg, corpulento sin panza, pelo color ceniza y barba candado, de ojos avellana, es mi esposo. Llevamos unos 18 anos de casados y nuestra cama siempre amanece desordenada por las agitadas noches. Nunca nos privamos de nada, y del primer día hacemos todo lo que surge sin dudas. Tenemos juguetes, esposas, látigos, ropa de goma y una tv grande en la pieza en la vemos algunas pelis por las noches. Venimos hablando de un trío y hasta pusimos reglas: nadie del entorno. El busca hombres y yo mujeres por diferentes sitios de citas Estábamos en la pieza con las laptop, mirando lo que cada uno había seleccionado y viendo los hombres le pregunté porque buscaba jóvenes bien provistos y musculosos. Su respuesta, obvia, fue que quería que disfrute y me guste Le aclaré que, por lo menos algunas como yo, preferimos hombres reales. O sea limpios, prolijos, pero tal vez.con algo de panza, edad media o adulto sin llegar a anciano, hombres que podría encontrar en la calle. Me quedé pensando unos días en su selección y fui una mañana al sexshop en qué siempre compramos algo. Cristian es un hombre alto, más que mi esposo, educado, tranquilo y siempre dispuesto a escuchar para ayudar a elegir lo adecuado. Hace más de diez años que nos conocemos y formamos parte de la clientela selecta, así que tenemos una confianza mutua muy fuerte. Entré y saludé, me respondió pero estaba atendiendo a una pareja gay, así que me puse a mirar que había de nuevo. Uno de los clientes, muy bonito, con un tono muy afeminado y suave, me preguntó si quería ayudar en la búsqueda suya. Me cayó muy bien y buscando lo ayudé a elegir algunas cosas para el placer con su pareja. Mientras el otro pagaba, seguimos hablando y me preguntó que buscaba yo. Le dije que no sabía, pero que tenía una duda. Le conté la idea que tenemos con Meco y la selección que había hecho él. - Te puedo decir sin que te ofendas? - Por supuesto, le respondí curiosa - Meco es puto mi amor! Me quedé mirando al gay, ya que pensaba como yo. Mi marido quería probar una pija y no se animó a decirlo de otra manera que con su selección. - Porque lo decís? Le pregunté para confirmar - Porque está mirando pijas nena. Es obvio Me rei y le agradecí su aporte. Ellos se fueron y me quedé con Cristian - Tenés arnés? Le pregunté - Por acá, pasá En otro cuarto había una vitrina en la que se podían ver muchos diferentes arneses. Uno que tiene doble pene, para penetración mutua me llamo la atención y cuando Cristian me dijo que además era vibrador, me lo llevé. Cristian había reforzado mi elección, contando que el tenía uno y era muy bueno. Llegué a casa y lo guardé más de una semana, pero cada noche me nacía el impulso de estrenarlo hasta que me decidí Puse unos vídeos dónde habían unos tríos en los que una pareja hombre/mujer sumaba a un tercero y se los cojia a los dos. Me di cuenta que esos vídeos nos calentaban más de lo común a ambos y mientras me cojia empecé a meter un dedo en su culo. Lo fui preparando de a poco, con mamadas que incluían largas chupadas de culo. Fue regular que el acabará mientras yo le hurgaba el culo con un dedo y eso me calentaba muchísimo. Cuando creí que todo estaba listo, una noche mientras jugábamos, fui al Placard y saque el juguete nuevo. Lo había hecho cerrar los ojos, y cuando los abrió se sorprendió, pero le gustó. Volví a la cama y durante la previa le hice que chupe la pija del lado que le iba a meter. Le chupé el culo por un buen rato y cuando lo tuve listo, me acomodé el arnés metiendo en la concha la parte de atrás y poniéndome arrodillada detrás de él, le levanté las piernas y se la fui metiendo despacio. Su cara era una delicia. Estaba entregadísimo. Se quejaba un poco, pero nunca me pidió que se la saque Lo empecé a cojer lento, y cuando le entraba a él, por el esfuerzo también me entraba a mí Me estaba enloqueciendo y sin darme cuenta se la enterré al fondo del culosu quejido me hizo dar cuenta que ya la tenía toda dentro y empecé ese mete y saca que me encanta. Estaba cojiendo a los dos a la vez y me resultó muy exitante. Acabé primera y en medio del orgasmo mis jugos cayeron en sus bolas y su culo. Gimió cómo si fuera yo y enloquecíle empecé a dar bien fuerte y mientras le hacía la paja. El deliraba de placer y yo volaba de caliente. Acabamos los dos juntos con el jueguete metido bien adentro de ambos. Me salí con cuidado y me saqué la parte que tenía dentro Me saqué el arnés y me acosté a su lado Me abrazo, me besó y al oído me agradeció la cojida. Así fue mi puto mi propio esposo.

Autor: Sandra Categoría: BDSM

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La esclava Erina.

2023-05-15


Relato de ficción sobre una mujer esclavizada y sometida.. Erina, mujer de negra piel y enormes atributos, cuerpo esbelto y hermoso trabajando con largas horas de trabajo forzado en la mina, es el juguete favorito del amo. Con un rostro fiero y músculos femeninos prominentes, es una gatita dócil en la cama del amo, la domesticó a base de golpes y de ver a su gente morir. Se entrega «feliz y complaciente» a su amo para salvar a su hijo, un niño de 3 años producto de una relación con otro esclavo, el hombre que Erina amo y ahora su osamenta adorna su choza como recordatorio. El pecado de Erina fue nacer mujer, negra y hermosa. Violada y explotada desde los 12 años cuando su comunidad fue allanada, saqueada y destruida. Sus padres murieron esa noche, 2 de sus hermanos siguen vivos, esclavos de la mina. Esa noche fue horrible, se la presentaron al hombre que es su actual amo, ofreció la «increíble» suma de 800 dólares por una hermosa niña negra sana y virgen. Esa noche fue violada por su nuevo dueño, al que le costó someter el espíritu indomable de la hembra, hicieron falta 4 hombres para sujetarla mientras su amo le arranca la ropa. La niña observa con ojos de furia y odio a quien dice ser su dueño, lo desafía con la mirada, pero Erina es una niña de 12 años, el miedo la quiebra al ver esa varilla al rojo vivo, al final están las iniciales de su nuevo amo, su nuevo dueño, un hombre sin escrúpulos que la marca sin piedad sobre su vientre. La niña grita y forcejea de dolor aunque le es imposible escapar, lágrimas caen de sus ojos, pero esto está lejos de terminar. Unas agujas perforan sus pezones y una pequeña barra de oro queda en su lugar, esa noche no solo su vientre y pezones fueron marcados, su ombligo, orejas y clítoris también. La niña se retorcía de dolor a cada nueva aguja que perfora su piel, pero eso no fue todo, pues fue colgada por sus pies de cabeza con las piernas abiertas totalmente desnuda maniatada, fuertes latigazos flagelaron su hermosa piel negra, a cada impacto le repetían que era una esclava, un producto, debía obedecer la voluntad de su nuevo amo. Un total de 12 latigazos, uno por cada año de vida en libertad, todos y cada uno de los flagelos cayó en la espalda, su nuevo amo no deseaba dañar sus suculentas nalgas o piernas, torneadas de tanto correr y ayudar a su madre en las labores domésticas. No saciado con el sufrimiento de la niña, su sádico amo la sumergió en agua helada, Erina sacude su cuerpo de desesperación y dolor, pero el propósito no es matarla, si no someterla. Colgada boca arriba por sus extremidades, piernas abiertas a más no poder, la niña de 12 soporta la tensión. En esa pose su zona pública es afeitada, axilas, vagina, ano, piernas, no hay rastro de vello en su cuerpo, se siente vulnerable, totalmente expuesta, destrozada y aún viene lo peor. Su amo es un hombre con un pene grueso y grande, compite sin problemas con los penes de los hombres de la comunidad de Erina, quién pese a ser de raza negra aún tiene el cuerpo de una niña de 12 años, no ha tenido su primer periodo y está a punto de ser violada. Las mujeres de su asentamiento le hablaron de eso, le dijeron que algún día sería su labor atender a su esposo y darle hijos, que debía hacerlo gustosa, con placer, pero en ese momento la niña está aterrorizada, este hombre haría algo imperdonable, la niña intenta resistir pero es inútil, al menos está a solas con el hombre, nadie sería testigo de su ultraje. La gruesa cabeza del pene hace contacto con los labios exteriores de la niña, sus negros genitales hacen contraste con el blanco pene que inhesto amenaza su pureza, la roja cabeza se pasea exponiendo el rosa y virgen interior. Voy a disfrutar esto zorra El hombre le habla en su dialecto, la niña entiendo perfectamente, se muerde los labios de rabia e impotencia hasta sangrar. Con una sonrisa burlona el hombre hace presión sobre la vulva de Erina, la chica se encaja las uñas en las manos para mitigar su dolor, es más su orgullo que el dolor físico, saber que no se pudo guardar para su futuro esposo. El glande se abre paso y rasga el interior, Erina deja de morderse para gritar de dolor, apenas entraron 8 centímetros de grueso pene en su seco interior. Sangre y lágrimas, el llanto de la menor, los gemidos de placer del hombre, 22 centímetros de pene que entran y salen, el clítoris estrujado con la penetración, las nalgas apretadas de la chica en un intento de oponer resistencia sin saber que incrementa el placer del hombre. La herida de su vientre se abre, Erina sangra de su espalda, perforaciones, vagina y vientre. Cada herida de su cuerpo sangra, son pequeñas gotas, pero suficiente para darle placer al hombre que ve su creación. Algún día tomaré tu vida! El sádico se ríe ante las palabras de la niña que llora de impotencia y dolor, continúa con su acto sádico de violación pero ahora estira los pezones de la niña, sus prominentes pechitos que auguran un hermoso par de senos. Erina está destrozada, llora desconsoladamente por el dolor, la humillación y la vergüenza, no pudo hacer nada para salvar o proteger su pureza. Los gruñidos de placer del sádico le hierven la sangre, repudia darle placer con su cuerpo a este cerdo, sus gemidos de placer le revuelven el estómago, desea vomitar, pero solo le queda soportar mientras su cuerpo de sacude con cada salvaje embestida. Pero el sádico es más sádico de lo que Erina espera, con toda la vergüenza del mundo ve a los 4 hombres entrar de nuevo, pueden ver su cuerpo desnudo, su vagina abierta con el pene del amo adentro. Los hombres están aquí para seguir torturando a la chica, entre los 4 la sujetan con fuerza, Erina está tan cansada que no puede oponer resistencia. Su cuerpo es puesto sobra abajo, un madero la obliga a bajar su espalda dejando su ano desprotegido y expuesto. En esa pose su nuevo amo retomo la violación, está vez los hombres no se fueron, sacaron sus penes y se masturbaron con la escena. Erina cerró con fuerza sus ojos, evitaba el contacto visual, tristemente para ella fue peor, podía escuchar los gemidos del cerdo y sus esbirros con mayor intensidad, el ardor en su vagina se intensificó, la chica comenzó a gritar en un intento de distraerse, fue contraproducente, solo consiguió que los hombres se emocionarán comenzando a rodearla sacudiendo sus penes. El repudio y la humillación de aquel acto la hizo vomitar, acto que fue celebrado por los hombres que la rodeaban. Sin saber por qué, la chica disfrutó de un segundo de paz, el pene que la laceraba abandonó su interior, pobre criatura, no se esperaba lo que seguía, no estaba al tanto de las costumbres de estos hombres. El pene apunta contra su negro y arrugado ano en medio de ese hermoso par de nalgas, redondas, duras, paradas. Sin ella saberlo o desearlo le otorgan al hombre una hermosa vista de un corazón listo para ser destrozado. Erina ahora es víctima del pánico, siente la gruesa cosa presionar contra su esfínter, en un esfuerzo desesperado hace fuerza para impedir el acceso a semejante acto atroz. La niña de 12 años grita de dolor, el pene se está abriendo paso rasgando su canal en su ingreso. Noooooooooooo por favoooooooooooooooooor nooooooo Eri le grita pidiendo clemencia, pide que detengan semejante acto vil, no entiende cómo pueden hacer eso, meter su pene por dónde defeca, en su cultura eso está relegado a la escoria que se acuesta con hombre y son expulsados de su comunidad. Los hombres vitorean extasiados por su amo que viola el orificio anal de la chica, con sus sucias manos acarician su espalda, la suciedad en sus dedos quema en las heridas, paradójicamente la chica agradece ese gesto, es tanto el dolor en su espalda que por momentos logra ignorar el dolor en su recto. Los testículos del hombre impactan con la vagina, Erina sabe que el cerdo llegó hasta el fondo. Totalmente derrotada la niña de 12 años se dejó hacer, su cuerpo le arde, le duele su vagina y ano, está tan agotada que no puede ni quejarse. La tortura duró un poco más, algo caliente en su interior que pensó era orín por lo abundante, pero recordó que es la semilla de hombre, Erina llora en silencio, cree que quedará embarazada, la pequeña niña no lo sabe, ignora que así no funciona el cuerpo humano, pero todos quienes la aman y estaban a cargo de su cuidado han muerto. El hombre abandonó el recto de la chica dejando tras de sí un agujero abierto de dónde brota su semen, Erina cree que todo acabó, pero aún falta una última humillación. Los hombres que la rodean y sacuden sus penes arrojan su semilla sobre Erina, espesas gotas de semen caliente se mezclan con su sangre. Sin poder evitar la chica vomita de nuevo, la semilla de todos estos hombres escurre por su herida espalda, le escocés. Gruesas gotas de semen destilan por su espalda, dejando a la chica en shock, totalmente desvanecida. Los hombres desatan a la niña y la sacan cargando, la arrojan a una celda de roca inconsciente, adentro hay 2 mujeres viejas, su trabajo es atender las heridas de la niña. Erina duró 3 días con fiebre por las heridas, cuando volvió en sí la chica se quedó acostada, destrozada, sin ánimos de seguir viviendo, pese a eso, su cuerpo sano lentamente, pero su alma y corazón están devastados. Erina es una hematita, hermosa como pocas mujeres, su piel negra como la noche y sus ojos que brillan cómo fuego, la niña de 12 años que fue testigo de cómo destruyeron todo lo que ama aguarda en silencio en su celda, ya no tiene lágrimas para llorar, ya no tiene voluntad para luchar, ya no tiene fuerza para oponerse, la niña negra de 12 años es un objeto sin voluntad, un artículo de cambio que su amo usará para su beneficio. Continuará.

Autor: DANCARRERA Categoría: BDSM

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El monstruo III

2023-05-03


La escoria de ser humano por fin le rompe el culo a su agujero de carne.. Una disculpa, la segunda parte de este relato lo subí como «la historia de Noemí». Hoy es un día especial puta, hoy cumples 4 años y te voy a reventar el culito, no va a ser bonito, pero no me importa, me la voy a pasar rico. La pequeña niña de 4 años llamada puta yace desnuda en la cama del hombre con el que ha pasado toda su corta vida, desde que su madre desapareció el hombre la ha usado para su placer, la pequeña ha bebido litros y litros de esperma caliente, forma parte de su dieta, es lo primero que le cae en su estómago por la mañana y es lo último por la noche. El día de hoy la pequeña puta va a recibir la leche en su culito, pero primero, necesita comerse la verga del hombre que por años le ha metido el dedo por su apretado anito desde que cayó en las manos de este monstruo, no será la primera vez que un objeto extraño entre en su culito, pero esta vez será la gruesa verga del monstruo. Así puta, boca abajo, te voy a amarrar para que no te muevas La chiquilla acostumbrada a los maltratos y abusos, normalizados desde que era una nena de 6 meses, totalmente interiorizado en su cabeza, se deja hacer y obedece al monstruo, el único ser humano que conoce, pues nunca a salido de esa casa, no conoce el mundo exterior, su educación consiste en vídeos sexuales donde hombres abusan sexualmente de menores, la pequeña puta aprendió desde muy pequeña que su único propósito en la vida es ser el agujero de carne donde el monstruo derrama su leche. Amordazada, atada de manos, a cuatro patas sobre una máquina que el monstruo fabricó para poder disfrutar de su puta sin problemas,el monstruo mete y saca su dedo gordo, el desgraciado aplica saliva para facilitar el acceso en el diminuto ano que se expande para recibir al invasor que aprieta con fuerza más que nada por el estrecho espacio disponible. La pequeña acostumbrada a la violencia se limita a soportar el abuso, lágrimas caen de sus ojitos, acostumbrada o no, la violencia que aplica el monstruo lastima a la nena, que sumisa como siempre, se deja hacer. El enorme pene parece bat de baseball en comparación con las nalguitas, estamos hablando que el monstruo va a violar el culito de una niña de 4 años a la que ha abusado desde que llego a su casa. Una mano en la espaldita, es tan grande que alcanza a sujetar las nalguitas con ella. Otra mano en su verga, la sujeta con fuerza por en medio para que no se doble. La gorda cabeza de su verga cubriendo el culito y separando las nalguitas. Con fuerza y determinación el monstruo empuja contra el culito de Puta, la niña gruñe detrás de su mordaza, su diminuto cuerpo atado a la trampa de violación impide que se le escape al degenrado que además sujeta a la nena con fuerza. El pequeño anito cede un poco pero en realidad nada ha entrado. Enfurecido el monstruo va por un poco de lubricante, no quería usarlo, la Puta debía albergar su verga ayudado solo por su saliva, pero es demasiado pequeño. Con violencia aplica grandes cantidades de lubricante en el culito rojo de la niña que no para de llorar, gruesas lágrimas caen de sus ojos, solloza y cierra sus ojitos cuando el dedo gordo entra fácilmente ayudado por el lubricante. Media botella de lubricante derramado y la otra mitad dentro de su ano, de nuevo el hombre toma su posición y ataca. Gritos de dolor apagados por la mordaza, el cuerpo de la niña se sacude con fuerza, pero es imposible, está bien sujeta, el diminuto ano cede y la gorda cabeza se abre paso abriendo con violencia el diminuto canal. Aaaaaaah si Puta, que rico culito tienes, ya entró la cabeza, vamos por el resto. El monstruo empujo y empujo abriendo el culito de la menor que lloraba y gritaba gruñendo con más fuerza cada vez que el enorme pene se abría camino. Sangre salía de la comisura de la penetración, el animal que la viola no tiene compasión ni piedad, está disfrutando el culito que ha entrenado por años y que el día de hoy es suyo. 8 centímetros de verga y ya no entra más, el monstruo se da un festín con su víctima que no ha dejado de llorar. Cállate puta, para esto naciste, para darme placer ese es tu único propósito en la vida. Afortunadamente para la pequeña Puta el hombre estaba demasiado excitado, 8 centímetros de verga y 15 minutos después, el monstruo eyacula litros de esperma en el roto culito de Puta que ahora solloza, sabiendo que todo había acabado. Rojo, con sangre, heces y semen, eso decoraba el culito roto de la menor que respiraba tranquila pero con un ardor en su culo que nunca había sentido. El monstruo dejó a la niña desnuda, colgando, sola y con el culo sangrando, así pasó la niña de 4 años que responde al nombre de Puta en su primera noche después de ser violada por su dueño. Continuará.

Autor: DANCARRERA Categoría: BDSM

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Lorena

2023-02-01


Conocí a Lorena una mañana de Mayo paseando por una feria. Por aquella época me encontraba yo bastante enfrentado con el mundo y conmigo mismo. Siempre había tenido problemas de mal humor, pero últimamente me estaban impidiendo ver el lado positivo de las personas y eso me preocupaba. Todo el mundo me resultaba egocéntrico y las cosas que tenían que decirme francamente repetitivas. Decidía salir de mi casa y darme una vuelta por la feria para ver si me animaba. Tres tiros a las escopetas, fallo, fallo , fallo. El desvío era excesivo para corregirlo en solo tres tiradas. Si pagaba por otros tres tiros, ya habría pagado más de lo que probablemente valía cualquiera de los premios. No jugaba por los premios, pero la idea me fastidiaba así que me fui. Mientras me alejaba del puesto, una chica se acercaba a el. Tenía el pelo castaño, con toques pelirrojos, probablemente teñido, y lo llevaba muy corto. Unos enormes ojos de color azul claro se encontraron con los míos antes de que siguiera bajando la vista hasta su escote. Tenía bastante pecho y me dio la sensación de que llevaba un sujetador ajustado para que no se le moviera. -Tres tiros por favor Yo me quedé parado en medio de la calle mirándola. Se colocó la escopeta en el hombro con firmeza, cerró un ojo haciendo una mueca de apuntar y disparó. Acierto, acierto, acierto. Los sonidos de los globos explotando sonaban de fondo mientras yo observaba su culo apretado en los vaqueros. Tenía un culo y unos muslos fuertes, pensé que debía ser deportista, y ya luego en que había acertado tres veces. Le regaló su peluche a un crio y pasó por mi lado sonriéndome de forma burlona. Sentí que debia decirle algo, así que me acerqué para caminar a su ritmo. Ella seguía mirándome pero no se me ocurrió que decirle, así que me dijo: -¿Quieres que te enseñe a jugar sin perder todo tu dinero? Yo sonreí encantando. Pasamos la tarde en los puestos y tomamos café. La verdad es que no se si Lorena me caía bien. Era aventurera y decidida, y eso me gustaba, pero también era demasiado extrovertida, hablaba con todo el mundo, y lo hacía demasiado fuerte. Tras la primera broma vinieron más y a veces me parecía que se tomaba demasiadas confianzas para ser la primera vez que nos veíamos. Al final de la tarde pasando por una calle tranquila me dijo. -Tio deja de mirarme el culo, tú estás peseando conmigo por que quieres follarme a que si? La respuesta me pillo de improvisto y no supe que responder, ella me agarró con fuerza del cuello de la chaqueta, noté que tenía fuerza, y me repitió con una sonrisa: -Quieres follarme o no? Yo me puse muy cachondo y la agarré del culo hacia mi mientras le comía la boca. Me besó de forma lasciva moviendo mucho la lengua. Luego se separó de forma brusca y me miró mordiéndose el labio inferior. Se quedó mirándome así mientras se restregaba contra mi polla empalmada. -Sígueme. Andamos durante unos 7 minutos y me llevó a una especie de gimansio de artes marciales. Antes de que pudiera preguntarle si el gimansio era suyo, se quito la camiseta y el sujetador y me enseñó las tetas mientras me miraba con esa misma cara de antes -¿Te gustan mis tetas? ¿Hmm? -Me ponía morritos mientras pegaba pequeños saltos para que las viera botar. Yo fui a chuparle un pezón pero ella me empujó bruscamente. Ante mi desconcierto, me dijo con la misma cara: -¿Que te creías que ibas a llegar aquí e ibas a follarme porque si? Eres un flipado. Pensé que sería un juego, pero la verdad es que me estaba tocando los cojones. Llevaba toda la tarde harto de sus jilipolleces y lo único que quería era follarmela de una puta vez. Mientras tanto ella se abrió la cremallera de los vaqueros y empezó a tocarse el coño por dentro. Luego se dio la vuelta y se pegó una torta en el culo. -¿Quiere follarme fuerte? Ven y fóllame. Cuando fui a agarrarla de la cintura se dio la vuelta se dio la vuelta y volvió a empujarme. Yo estaba muy duro y no tenía ganas de más juegos, así que la agarré y empecé a bajarle los pantalones. Ellas se los agarraba con mucha fuerza, así que le metí la mano por dentro, de las bragas. Ella apretaba los dientes e intentaba zafarse de mi, pero le meti 3 dedos por el coño que lo tenía muy mojado y caliente. Elle gemía e intentaba evitarlo cerrando las piernas pero mis dedos yas estaban dentro y movía el brazo hacia delante y hacia detrás con fuerza. Me encantaba ver como gemía con cada zarandeo. -Te gusta verdad? -Le dije. -Ahora te voy a follar La tiré al suelo y le intenté quitar los pantalones. Ella me dio una patada muy fuerte en el boca que me hizo crujir la mandíbula. Yo me incorporé de nuevo muy enfadado y muy cachondo. Le quité los pantalones y le arranqué las bragas. Era muy fuerte pero cuanto más se oponía más necesidad tenía de metérsela. Se la metí muy rápido y muy fuerte y ella pegó un grito. Sí ahora eres mía, pensé. Me miraba con furia mientras me la follaba. Intentaba apartarme con los brazos pero la agarré de las muñecas y extendí los suyos contra el suelo. -¿ Te gusta puta? -Le pregunté Ella ya no hablaba solo gemía a través de los dientes apretado meintras me miraba a los ojos. -Voy a correrme dentro de ti zorra, que te jodan Seguía follándo mientras pensaba en correrme dentro suya para que se jodiera. Pero antes la saqué y se la metí por el culo mientras ella gritaba con la boca muy abierta y los ojos apretados. No paraba de gritar y yo ya me iba a correr, cuando me golpeo con la mano abierta en la nariz. Me dolió mucho y me aparté. Mientras me tocaba la nariz con las manos, ella se acercó, se escupió en la mano, y me frotó la polla dos veces. Yo no aguanté y empecé a correrme en su mano, mientras ella me seguí frotando la polla apretando mucho. -Hmmm, probrecito, al final se ha corrido fuera. Mira que de leche tenías ahí eh… Ella me miró a los ojos mientras se chupó la mano hasta dejarla limpia. Luego se vistió y se marchó.

Autor: Anónimo Categoría: BDSM

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Yo y mi novio estamos iniciando en el BDSM

2023-01-24


Para salir de la rutina de nomas coger hemos iniciador con el bdsm yo y mi novio la primera ves que lo hicimos fue en un baño la idea era llegar al motel pero después de haber llegando a cenar tacos les platicare yo y mi novio tenemos una conexión especial no la llevamos bien y cuando nos conocimos hicimos clip con las pura mirada esa historia se las contare en otro relato. nosotros siempre que salimos vamos a los tacos nos encantan los tacos para eso ya habíamos platicador de salir de la rutina entonces esa noche después de cenar nos hirvamos a l motel pero yo tenia que pasar a dar una vuelta a la bodega para revisar que todo estuviera bien llegamos a la bodega revise y todo bien pero ahy cambio la cosa nos pusimos a danos unos besos y se calentó la situación es lo que me encanta de mi novio es bien cachondo conmigo me espesor a manosea me desnude y abrimos la bolsa del kit bdsm para hacerlo mas interesante yo le digue a mi novio tu no te quites la ropa y yo nomas desnudo y espósame y véndame para que me violes ya después de esta todo amarrador y sometido me llevo al baño me espesor a dar latigazos a tocarme y nalguearme pero como yo estaba vendado y no vea la sensación es muy diferente y excitante porque no sabes que movimiento va hacer me sentó en el baño y escuche como se bajaba el cierre y me dirigió mi cabeza hacia su pene y empecer a chúpasela y con el látigo me azotaba la espalda así estuvimos un buen rato la verdad a mi me encanta chúpasela. después de ese fabuloso momento me dio la orden de para y me puso en cuarto con las manos en el tanque del baño y que mis nalgas quedaran apuntado hacia el para ese momento yo antes de llegar por el a su casa me puse un pug anal es una sensación rica antes de coger y lubricar para tener listo el ano para tener sexo oral volviendo a lo acontecido me agarro las tetas aunque soy hombre tengo las tetas algo grande mi novio les encanta y se la pasa agarrándolas son todas suyas a ami eso me encanta, continuando con una mano me agarras las tetas y con su otra mano me mete el pug anal y lo sacar yo estaba tan caliente que a pesar que hacia frio era en la noche yo estaba súper caliente y mas en esa posición y el castigándome por portarme mal yo seguía igual amarrador y vendado. después me volvió a sentar en el baño y me dirigió para volvérsela a chupar y seguir por vario rato chupándole su pene hasta que mi novio se vino y me comí su mecos sentía como entraban a mi estomago me encanto después de cómeme sus mecos y limpiarle su pene yo con mi boca me dice es tu turno me puso de pie y me empezó a chupar mis huevos ese es mi punto débil me encanta como me lo hacer me seguía chupando y agarrando mis tetas y tocando todo de mi hasta que me vine casi me caigo porque estaba de pie el me detuvo si no me caigo me quitar la venda y tenia toda la piel de gallina me tuve que sentar en el baño a recuperar mi fuerza como mi ropa quedo del otro lado de la bodega mi novio fue por ella y me la trajo me vestir cerramos la bodega y lo lleve a su casa ya en el camino nos fuimos platicando que no alcanzamos ni siquiera llegar al motel nos encanta anda por la ciudad paseando mientras el me manosea en el coche platicamos, reímos, vamos a visita taquerías esa es nuestras relación de mi novio y yo tengo mas historias de el y yo se las contare amigos. nota: esta semana cumplió años mi novio pero como era entre semana no pudimos celebrar pero hoy sábado me lo voy a llevar a darle su regalo bueno varios regalos se lo merece es el mejor novio.

Autor: Anónimo Categoría: BDSM

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Quería saber lo que se siente estar amarrada en la cama

2022-12-13


Mi primera experiencia amarrada enla cama . Hola me llamo Danna tengo 24 años estatura 150 delgadita cabello largo tetas normales enfin les confieso que asé tiempo tenía ganas y curiosidad de estar amarrada enla cama tanto era la curiosidad que yo misma Melo ise pasa que empece a comprar cadenitas y después candados después que conseguí todo un día que me quedé sola enla casa. Empecé a primero me bañé me depile y y me arregle después ya bañadita fui por dos plátanos después me acosté y amarre mis dos piernas después amarre mi otro mano enmi pancita me puse almohada después de un esfuerzo lo gre cerrar el último candado Demi mano después me quedé así y de repente seme calleron las llaves Enel piso y empeze a intentar alcanzarlo. Pero no podía empeze a centir miedo y empecé a mojarme estaba cintiendo miedo y placer y pensando ahora como me desató entonces como mi cama está enla ventana abrí poquito con la cabeza y vi afuera un vecino de alado y le drite hola vecino ven le dije,y sin pensar se vino le dije oyes puedes pasar enmi casa y venir enmi cuarto y me dijo no como crees es que nesesito ayuda le dije mira abajo del tapete está una llave y dijo está bien hay boy . Tardo un ratito de repente entra al cuarto hooo le dije me ayudas es que entró un ladrón y me amarró así me ayudas le dije y me quedaba mirando y dice ufff pero que putita dijo que dijiste le dije nada dijo me ayudas le dije otra vez y entonces dijo te he visto como mueves ese culo pero hoy ufff mira te ayudo pero no será gratis y yo no porfavor si putita me dijo así que agárrate noo entonces se desnudo y saco un miembro grande y grueso y después me dijo abre esa boca y yo lo abrí y no cabía ese pene enmi boca. Pero Mela empuja y ummmm nooo entro asta mi garganta me estaba atragantando mis ojos salían ladrimas pero me gustaba centia algo raro enmi y me empezó a cojer mi boca haaa haaa hoooo noo y melo saca y se va atrás Demi meda una nalgada y me dice putita hoy comeré este culito pero que suerte decía y yo mordí la almohada y de repente centi cómo ese pene empezó a abrirme mi culo ummmmm ummmm ummmm y de repente noooooo y entro asta adentro me dolió después me empezó a cojer haaa haaa hoooo ummmm nooo ya para para noooo porfavor nooo y de repente sentí que Melo clava asta dentro y centi cómo ese pene se movía y el dijo pero que putaaa y después sentí como se sacudía algo dentro demi y de repente centi algo caliente dentro demi ummmmm y se quedó quieto supongo quesé vino y yo me quedé quieto me dolía y después Mela saca haaa listo puta me dijo y le dije ok ahora sueltame porfavor y me empezó a soltarme nomás delas piernas y me volteo me dice falta esa rajita noo ahí no porfavor le dije abrió mi pierna pero de repente se escucha abrirse la puerta principal y dijo Danna ya regresé y dijo es tu mamá sabes que me voy dijo y me ayudó a soltarme Demis manos rápido y se viste y yo me levanto y me visto también me puse un calzón y un vestido rápido entonces le dije quédate aquí y yo salí aver AMI mamá y cuando estaba parada Centi enmi nalgas salir algo enmi culo y me dio tantas ganas de ir al baño y le dije ahorita vengo boy al baño y fui y saque todo la leche que tenía dentro demi me ardía bastante mi culo. De ahí le dije al vecino ya salte sefue asu recámara la puerta está abierta y salió después me cambié de calzón y de vestido de ahí me quedé pensando que si disfrute todo eso al día siguiente me tope al vecino y me ablo y me dijo Danna ven y me dio 2000 pesos me dijo solo es por agradecimiento noo le dije tómalo y ya sabes aquí no paso nada ok me dijo y yo ok y así fue mi experiencia.

Autor: DANNA1212D Categoría: BDSM

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A mi jefe le gusta que lo humille, lo orine y me lo coja con mi citurón

2022-11-28


Hola soy fabiola tengo 20 años soy delgada con poco de todo no podia cometie en la oficina donde trabajo con las curviadas compañeras que tengo pero tube la fortuna de una tarde limpiado la oficina de mi jefe un licenciado de unos 55 años un hombre maduro con pocas canas y seriedad en su caracter nunca me imagine encontrar un tipo diario con sus fatacias esa ocasion no entendia las palabras pues las iniciales bdsm no las entendia ni sex slave ni misstress pero llegado a a mi casa me meti a mi navegador y busque la informacion. estube viendo por horas videos bdsm. la verdad me agrado hasta me exito ver aquello pero aun no lo creia de mi jefe pues es un hombre de mucho respeto por lo que espere mi oportunidad ya no me precupaban las compañeras hasta operadas de seños que le coquetaban pues es divorciado y muchas queramos ser sugar beby de el por lo abultado de sus cuentas bancaras pero yo ya sabia el secreto solo era de hacer un plan. compre un traje de piel de dominatrix un cituron con didos intercambiables y otros accesorios solo faltaba el momento y se me dio una tarde ya todos habian salido yo me quede disque acabando un reportr ahi estaba mi jefe con nervios entre a su oficina mi feje serio como siempre agarre valor y le hable con autoridad se saco de honda y me dijo que que traia aremeti con vooz firme y segura que quera que me obedeciera lo agarre de los pelos y lo puse a limpiarme los zapatos pronto salio su lado sumiso a mime agradaba tener el control saque de mi bolso un latigo sexual y se quito la camisa para que le diera su castigo vi que disfrutaba el dolor hise que me rogara saque dos pinsas una en cada pezon me puse mi traje y mi cituron hice que lo chupara casi se ahogaba pero el estaba en su fatacia sexual se inco me suplico para que me lo culiara le puse lubricante le meti varios dedos y depues lo puse de perrito empeze a follarlo es la mejor senciacion que e tenido en mi vida tener contro total lohise que me dijiera que yo era la que madndaba me dieron ganas de orinar el me pidio de rodillas que usara su boca como baño asi lo hise se tomo todo lo que salio de mi vagina lo hiso gustoso volvi a peterle mi dido por su culo pero esta ves de frente me pedia que lo cachetara eso fue lo que lo puso en un extasis total vi sangrado de su labio pero a el le fasina termino con los ojos voltiados de placer. de esa noche ya no volvi a la oficina el me manda dinero semanal solo viene los sabados a que lo humille , golpe y orine

Autor: topo76 Categoría: BDSM

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